The Video Games Authority: el precio de catalogar arte
Volveré a adentrarme en lo que me parece el mercado de compra y venta de videojuegos español entre particulares: pura caspa. La llegada de Wallapop me impulsa a lanzarme en los próximas semanas a rescatar el tema y organizar un tour por "cuñaolandia". Lo haré, lo prometo, ya que España y los españoles no dejamos de ser un país y una gente del todo particular en todo lo que hacemos; ni los que compran comprenden el valor de un videojuego clásico o lo que sinifica tener un pedazo de historia en tu casa ni los que venden entienden que un juego de Game Boy Advance pocho, por mucho que venga con caja e instrucciones, no puede costar 60 euros.
Para que un día nos tomemos en serio el mundo del videojuego y esa compra entre particulares debería aparecer algo como la VGA, la Video Game Authority, un organismo interesante y necesario entre el coleccionismo serio. La VGA se encarga, de forma objetiva, de valorar el estado de un videojuego de colección. Toma las diferentes condiciones que llevan a un título a estar bien conservado o no, y mediante pago previo, valora y precinta el producto de tal forma que garantiza la condición de su estado de cara a una futura venta siempre que no salga de su caja, sellada debidamente por VGA. Me ha parecido algo interesante y me he lanzado a buscar más información al respecto.
Resulta que es un grupo que opera con todo tipo de objetos, no solo videojuegos: hay figuras de acción, coches en miniatura y muñecas. Para medir la calidad del producto tienen en cuenta multitud de elementos. Por ejemplo, el hecho de que esté precintado, el estado de la caja, instrucciones disco o apariencia general. Dependiendo de lo bien o mal que esté se cataloga del 10, un bronce en "mal estado", a 100, Gem Mint, la máxima categoría. Para entendernos, un juego en excelentes condiciones solo aspira al 75, por lo que lograr un 100 es tener el juego igual que cuando salió de la tienda y se aposentó en tu estantería envasada al vacío.
El precio también es un asunto interesante: varía según el valor que tenga el juego, por lo que no será lo mismo valorar un Nintendo World Championship 1991 que un Duck Hunt + Mario Bros. de NES. Por supuesto, se comprometen a cuidar al máximo el producto, de sellarlo y valorarlo, obteniendo descuentos importantes si mandas varios juegos o si te haces socio. Un mundo, vamos. Seguiré investigando. aquí nos queda fiarnos del mamón que ha puesto un juego cutre en eBay, que piensa que tiene oro por haber encontrado un cartucho en un contáiner y pensar que con su educación de granja se hará rico vendiendo medio armario de desperdicios en Wallapop. Os sorprenderé, os lo garantizo.
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