The Division y la frontera entre el single y el multi

The Division quiere ser social, integrando en su juego mecánicas de multiplayer. No al nivel de los títulos de From Software, el guiño a estos de Watch Dogs o Need for Speed Rivals, sino de una manera más cercana a Destiny; aunque tampoco. The Division tendrá varias zonas en su mapeado preparadas para el encuentro PVP, con zonas diferenciadas para atacarnos o colaborar.

 

Digo más parecido a Destiny que al resto, porque la intención de unir multi con single es más a nivel de accesibilidad, de menús y de cómo percibe y llega al jugador a esas zonas que a desdibujar las barreras o integrar absolutamente ambos modos. Las dos vías, tanto la de los Souls como las de Destiny son sensacionales. Uno crea un extraño sentimiento de hermanamiento, lealtad y odio; odio hacia los invasores que nos molestan en las partidas, pero cariño a aquellos que llegan a ayudarnos y que, al morir nosotros echándoles un cable a ellos, se giran hacia el etéreo cadáver mientras  se desvanece y ejecutando una reverencia de agradecimiento (perdonadme, estoy melancólico porque ya me acabé todos los DLC de Dark Souls II y no va a hacer más. Sniff).

 

 

Destiny, y tiene pinta que este The Division también, no llegan a hermanar al jugador con el resto, porque se llega a ellos buscándolos, no  de manera espontánea; como cuando conoces a un amigo en la vida real. Y eso está muy bien, porque la distancia que dibuja este planteamiento habilita combates, digamos, más fríos y profesionales. Nunca he sentido nada por nadie que me encontrara jugando a Destiny, y tampoco lo he necesitado. Los mundos del juego de Bungie son fríos y metódicos, son tan solo "útiles", herramientas para que fluya el juego, pero nada mas (aunque podría haberlo sido). En Destiny no tiene sentido querer unir de manera falsa a los guardianes, aunque la trama general así lo sugiera en un principio. Al final sabemos que lo que de verdad importa es que nuestro guardián sea la pera. Y punto.

 

The Division también es frío, aunque cooperativo. Es estratégico, no necesita el azar, no viene a hacer amigos, el mundo no es hostil ni tampoco tiene bondad. Cada uno está bien en su casa sin aparecer de manera espontánea. Y si quieres hacer amigos, vas y los buscas, como un soldado acudiendo a un cuartel. La evolución de la presentación del multijugador en un videojuego está evolucionando en estas dos vertienes, y ambas son buenas y muy interesantes.

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