Steam Link, la ganga de las ofertas de navidad de Valve
Tenéis ante vosotros a un usuario reticente del juego remoto. No acostumbro a fiarme de este tipo de gadgets por malas experiencias, pero también porque su funcionamiento óptimo suele depender de demasiadas variables (calidad y tipo de conexión, potencia del emisor, distancia, etc.) y, con el tiempo, uno pasa a ser perro viejo y quiere soluciones rápidas. Por ese mismo motivo mi PC es uno de aquellos que va tirando desde hace años con el cambio de piezas; no necesito ir a la última mientras las cosas funcionen.
Sin embargo, desde hace unos meses cambié de vivienda y tengo un salón que, sin ser nada del otro mundo, me invita más a jugar. El sofá, una mejor pantalla, una distancia correcta con respecto a ella y una buena iluminación natural han hecho que ese lugar de la casa pase a acumular la mayor parte de horas de mis partidas, pero irremediablemente esto ha dejado de banda a la torre, relegada a aquellos casos -no pocos- en los que debo recurrir a Steam, Origin y demás. No quería admitirlo, pero Steam Link se antojaba como una buena solución.
El caso es que tenía pensado pasarme a cotejar precios con las benditas rebajas navideñas de Valve, pero eso terminó llevando menos tiempo del esperado. Por si no lo sabéis, Steam Link se encuentra rebajado un 90% en estos momentos, lo que significa que sumando los portes y viviendo en España podéis haceros con él por poco más de 20€, un precio muy alejado de los casi 80 que suelen costar compra y envío. Llevo un par de días con él y, sin ser un as de las instalaciones, os garantizo que si sois como yo ha llegado el momento de plantearse su compra.
Os voy a resumir mi instalación, que no es la óptima, pero me está ofreciendo un tiempo de respuesta casi inmediato. Aunque desde la plataforma de compra se recomienda el uso de un cable de red para Steam Link, el mismo tira de la conexión Wi-Fi mientras el PC sí que está conectado físicamente al módem. Ambos dispositivos están a una distancia de seis metros y los separan un par de paredes, pero ni eso ni mi contrato de 50MB de fibra están afectando a un juego remoto con el que las partidas a Wolfenstein II: The New Colossus o a Bayonetta son prácticamente las mismas que las que disfruto directamente desde el ordenador. Y recalco, como veis es fácil tener unas condiciones mejores que las mías.
Cada caso es un mundo, sí, pero debo reconocer que la instalación de Steam Link es mucho más fácil de lo que esperaba y su respuesta es considerablemente buena, más al precio por el que está ahora. El dispositivo es pequeño, el diseño es minimalista pero robusto y el funcionamiento sorprende para bien. Recomiendo que evitéis conexiones inalámbricas siempre que podáis, pero en el caso de que las haya parece que el rendimiento tampoco se ve afectado en demasía. En resumen, revisad la carta de los reyes si aún podéis y enviadla al bueno de Gabe Newel, porque sabe lo que se hace.
<< Anterior Siguiente >>