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Si no has jugado a El Día del Tentáculo mereces la muerte

Y lo sabes
Por Kysucuac

No me podéis negar que el Día del Tentáculo es el juego más genial de LucasArts. Fin de la cita, del artículo y de toda discusión. El Día del Tentáculo es la mejor aventura gráfica jamás creada y nadie puede decir lo contrario. Un gilí, un heavy y una estudiante más o menos responsable se encargan de salvar el mundo de la invasión de los tentáculos. Y no estamos hablando de hentai, sucios pervertidos. Si todavía no habéis jugado a esta maravillosa obra todavía estáis a tiempo, que para algo se inventaron los emuladores. Pero si os da pereza (no tenéis perdón) sólo tenéis que esperar un poco más, lo justo para verlo llegar a PS Vita, PC y Playstation 4.

 

 

Maniac Mansion 2: Day of the Tentacle es uno de los títulos más apreciados en todos los niveles dentro de la cultura del videojuego. No es para menos. Se trata de un juego de 1993, y a día de hoy no ha habido una aventura gráfica como ésta. La protagoniza Bernard Bernouilli, el nerd del Maniac Mansion original, y la historia es algo posterior a la del primer juego, pero sin tener mucho que ver, sólo lo justo. El Día del Tentáculo tiene todo lo que un juego necesita: humor, suspense, personajes carismáticos, un entorno único y detalles, detalles y referencias por doquier. Nada puede superarlo. Nada.

 

LucasArts creó algo demasiado bueno, pero, por desgracia, las nuevas generaciones apenas saben qué es. Acostumbrados a juegos de acción, a mundos abiertos y a peleas dinámicas, hemos dejado a un lado algunas obras del pasado que bien nos vendría recordar. El resurgir de las aventuras gráficas le va a sentar muy bien a dichas obras, y más con esa remasterización a Day of the Tentacle. ¿Y por qué es necesario que a éste se le haga una remasterización y no a Final Fantasy VII (no tienen nada que ver, pero un loco me paga cada vez que insulto a Cloud y, oye, de alguna forma tengo que pagarme las facturas)?

 

El Día del Tentáculo es el buque insignia de las aventuras gráficas, más, incluso, que Monkey Island (al cual, por cierto, se hacen muchas alusiones en este Maniac Mansion 2). Es un juego al que ni le sobra ni le falta nada. Y, además, es un metajuego. Porque si alguien se atreve a decir que Maniac Mansion es mejor que la segunda entrega, sólo tengo que decir que dentro de Day of the Tentacle puedes jugar a Maniac Mansion. Y a callar.

 

El hámster calentito, el payaso Oozo, el coche sin lavar, las cronoletrinas y hasta el tentáculo verde. Son detalles que cualquiera que haya jugado los recuerda, incluso más que al pollo con polea. Cuando recuerdo el juego y me entran ganas de volverlo a jugar una y otra vez, pienso en todos aquellos que se lo han perdido. Por eso es necesaria una remasterización. No, Day of the Tentacle no necesita cambios en sus gráficos, es perfecto como está. Pero sí necesita llegar a las nuevas generaciones, necesita que la gente de hoy en día lo vea como lo que es: la base de muchos juegos de la actualidad y uno de los mejores recuerdos que cualquier nostálgico puede guardar en su corazón.


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