Sentir nostalgia de algo que no has jugado

Después de varias semanas dándole a Theatrhythm Final Fantasy, el musical recopilatorio de la saga, muchos nos hemos dado cuenta de que nos causa una nostalgia extraña. Las secuencias de vídeo acompañadas de grandes composiciones musicales nos hacen querer revivir aquella época, incluso a pesar de no haberla vivido.

Hablando como jugadores europeos que tuvimos que descubrir todo Final Fantasy pre-VII esperando a las conversiones actuales o utilizando otros métodos, nos damos cuenta de que el sprite de la época 16-bit era algo muy especial. Y lo reconozco, volver a ver a Terra soltando la melena al viento o a Squall bailando con Rinoa me causa nostalgia, por haberlo conocido en su día, pero la historia de Bartz y su rivalidad con Gilgamesh ni la conozco, pero me he enterado de ella gracias a esta biblioteca Final Fantasy en miniatura, y aún así, ver imágenes de un FFV que no he jugado también me causa esa nostalgia. Pero es nostalgia de la época, de aquella edad dorada del RPG japonés.

Esta nostalgia me lleva a querer rejugar toda la saga, a conocerla a fondo, sabiendo que ha tenido grandes entregas, sabiendo que se ha hecho un nombre gracias a ellas y no a lo que es ahora. Ese efecto, el de querer conocer todo lo que aquí te muestran, es algo que también tiene el crossover por excelencia, Super Smash Bros. Brawl, toda una enciclopedia nintendera con una cantidad de datos y detalles que abruma. Unir actualidad, retro y todo tipo de iconos permanentes y explicar todos sus lazos para hacer que no te quieras perder nada de toda su historia, ese es el poder de un buen crossover.

Y es un poder que Sony está despreciando infinitamente con su PlayStation All-Stars Battle Royale. Pudiendo hacerlo, está consiguiendo que ningún jugador de antaño se sienta atraído por su crossover, más aún viendo el plantel de personajes que se filtraba hace unos días, tan centrado en la actualidad que desagrada. Dos versiones de Cole de inFAMOUS, el nuevo Dante emo, Big Daddy, el Raiden de Revengeance, Jak, Ratchet, Kratos, Nathan Drake,... Y Sir Daniel Fortesque (MediEvil) y Spike (Ape Escape) como únicas referencias a la primera PlayStation, cuando podrían tener decenas.

Está tan centrado en la actualidad que causa más rechazo aún que el ver a kilómetros que es un mal clon de Super Smash Bros. Un crossover ha de ser mucho más que eso, ha de rendir culto de alguna forma a todo lo que representa, y sobre todo, ha de presentar algo interesante, ha de descubrir algo nuevo para todo tipo de jugador. Incluso todo Marvel vs Capcom nos hace conocer algo nuevo de cada bando, por no hablar del rebuscadísimo plantel de Tatsunoko vs Capcom y sus grandes bases de datos.

Y ya que empezábamos hablando de Squaresoft, que no de Square Enix, todo esto ha hecho volar la imaginación de uno, pensando en que, si alguien tiene el potencial para hacer el crossover definitivo que llegue a todas partes del mundo y reivindique aquella época dorada, esa es Square Enix. Un Squaresoft vs Enix All-Stars o algo así, enfrentando a personajes de toda la saga Dragon Quest contra toda la saga Final Fantasy, y es más, añadiendo títulos que han reventado moldes a lo largo de la historia como Chrono Trigger, Xenosaga, Illusion of Time, Terranigma, Vagrant Story, Secret of Mana, Star Ocean, Breath of Fire,... Igual ya es pasarse, pero pocas opciones mejores para un crossover podría haber.