Sensaciones encontradas con Blackout, el battle royale de Black Ops 4
Desde ahora mismo en PS4 y hasta el próximo 17 de septiembre, todos aquellos jugadores que hayan reservado Call of Duty Black Ops 4 pueden disfrutar de la versión beta de Blackout, una de las mayores novedades de esta nueva entrega. Se trata del modo Battle Royale que Treyarch ha construido para la ocasión, que se aleja y mucho de la propuesta multijugador típica de Call of Duty y que nace para tratar de recuperar un trozo del mercado dominado por este género en los últimos tiempos.
He podido echar unas cuantas partidas y he de decir que tengo sensaciones encontradas con este modo de juego. Por un lado, me parece una buena idea traspasar las fronteras de siempre y que las mecánicas de shooter de Black Ops 4, sus armas y escenarios propios de la saga durante todos estos años estén presentes en un Battle Royale, pero por otro lado sigue encontrando muchos problemas a este género y a este modo en concreto.
El primero de ellos es que las mecánicas y el control de Black Ops 4 están claramente diseñados para un ritmo de partida frenético, en el que cada movimiento cuenta y en el que encuentras enemigos continuamente a tu alrededor. En Blackout, sin embargo, y como en cualquier otro Battle Royale, pasas mucho tiempo solo, buscando equipamiento y sin saber muy bien si hay otro jugador por los alrededores. El juego trata de encontar su personalidad, aunque lo hace de una forma muy inspirada en juegos como PUBG: encuentra armas y también modificadores por el escenario, para tratar de equiparte lo mejor posible ante los posibles enfrentamientos futuros. Es un juego cuyo núcleo jugable está hecho para ser frenético, y este modo no lo es.
Pero dejando de lado esas percepciones, que reconozco que son muy subjetivas, Blackout tiene muchos problemas como Battle Royale. No me convence en absoluto la manera de obtener las armas y las piezas de equipamiento, que se consiguen manteniendo el botón cuadrado pulsado durante un rato. Este movimiento, que puede resultar anecdótico sobre el papel, resta muchísimo ritmo mientras juegas. Entras a una estancia y tienes que echar un vistazo a las armas del suelo (cuyo nombre también cuesta leer) y a su vez perder un tiempo preciado en mantener el botón pulsado para conseguir, en ocasiones, muchos objetos de la misma habitación. Se pierde mucho tiempo y resta la sensación de peligro constante, haciendo que te pierdas demasiado entre lecturas y menús. Fortnite, por ejemplo, hace esto terriblemente mejor que Black Ops 4.
Por último, pero no menos importante, no deja de ser otro Battle Royale que se diferencia más bien poco de todos los demás. Sí, cuenta con el control y las mecánicas soberbias de Call of Duty Black Ops 4, pero no se aprovechan del todo cuando la mayor parte del tiempo solo estás corriendo en busca de botín y los enfrentamientos se resuelven en unos pocos tiros. Esperaba mucho más, si os soy sincero, o algo que marcara algo de evolución a un género muy trillado. Espero que sepan obtener datos útiles de la beta y que la versión final de Blackout que llegue con el juego sea mejor, de lo contrario me temo que la principal razón por la que comprar este juego seguirá siendo su modo multijugador competitivo más frenético, que oye, tampoco pinta nada mal.
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