Sea of Thieves despierta su interés en PS4 con su impactante beta abierta

Sea of Thieves se promete como algo grande, muy grande en el mercado del videojuego no sólo entre los usuarios de Xbox One, sino también entre los usuarios de PS4, que hace unos días iniciaban una petición en Change.org que instaba a la gente del estudio británico de Rare a lanzar su juego también en Playstation 4. Lo que es un más que obvio imposible -no creo que Microsoft vuelva a hacer lo que hizo con Mojang y Minecraft- sirve de sobra para ilustrar cómo un juego que empezó siendo visto como 'otro juego online más' ha logrado captar la atención del público y prometerse como uno de los grandes lanzamientos de este primer trimestre de 2018. 

 

 

Antes

Sea of Thieves llamó mi atención durante la anterior beta gracias a una forma de plantear su juego y aventura con unas leves, muy leves indicaciones y un mucho de juego en comunidad. Tanto en equipo junto a una tripulación como en solitario como aventurero perro de mar, el juego de Rare consiguió tenerme un fin de semana liado en labores de piratería, buscando cofres, descifrando mapas, vendiendo botines y luchando contra temibles tempestades. 

 

Sin andarnos por las rama, con las primeras betas de Sea of Thieves, Rare logró hacer toda una declaración de intenciones que consiguió enganchar a todos los que deseábamos un buen juego de piratas y no lo sabíamos. La perfecta ambientación con esa mezcla visual de dibujos animados y realismos, la presentación del mejor mar de la historia del videojuego y las múscias, la vida en alta mar, los abordajes y las luchas a cañonazos fueron más que suficiente como tarjeta de visita de un juego que tenía mucho que ofrecer. 

 

 

Ahora

Tras la llegada de la beta final, a 8 días de su lanzamiento final en tiendas y su llegada a Xbox Game Pass para siempre y sin coste adicional, Sea of Thieves demuestra una serie de cambios impactantes que afectan a la jugabilidad, la historia, su aspecto visual y nuevos contenidos y modos de juego para hacer de nuestra aventura por los siete mares algo mucho más variado y llevadero de lo que pudimos disfrutar en sus inicios. 

 

Los piratas, grumetes, corsarios y bucaneros que volváis a los mares de Sea of Thieves estos días aprovechando la beta abierta que comenzó mañana descubriréis un mundo más vivo, más completo y mucho más potente visualmente gracias a un mayor refinamiento en las texturas, un mar todavía más realista y dinámico y unos cielos que paasan del sol a la tormenta creando bellísimos efectos de luz. 

 

Por si esto fuera poco, se ha pronfundizado en nuevos contenidos como la presencia de fuertes dominados por esqueletos que invitan al PvP, la posibilidad de hacernos con animales para aumentar nuestros ingresos y nuevos tipos de botín, encargos, mapas y la promesa de unas reliquias y nuevos objetos que estarán disponibles en la versión final del juego. Junto a esto, la posibilidad de elegir a nuestro personaje y muchas nuevas opciones de personalización junto a la obligación de elegir tan solo dos armas de entre las cuatro que tenemos al empezar el juego.

 

 

Más allá del vendeconsolas

Sea of Thieves ha pegado el campanazo, ha soltado la mayor y navega viento en popa a toda vela hacia el éxito seguro en Xbox One y Windows 10. Estemos de acuerdo o no con la terminología del 'vendeconsolas' o con la teoría de que unos pocos títulos puedan forzar a un usuario a comprar o no una plataforma, lo cierto es que Xbox One ha añadido un buen exclusivo en consola a su catálogo. Un juego que puede que no te venda la plataforma por sí solo, pero que sin duda sirve para añadir valor a una consola que parece estar decidida a levantar cabeza en los próximos meses. 

 

Habrá que esperar al día 20 para poder poner al fin las manos en el juego y comprobar todo su potencial. Hasta entonces, a la espera de ver si es oro todo doblón que reluce, hay ganas, y muchas, de ver si Rare ha conseguido volver a ser la que era en los tiempos de los hermanos Stamper. 

 

¡Nos leemos!

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