¿Se arriega el videjuego a repetir el crack de 1983?
Un nuevo informe realizado por Superdata y distribuido por Digital River afirma que el videojuego podría enfrentarse a un nuevo crack como el de 1983 en el futuro debido a la sobresaturación del mercado. En él se deja ver una idea de que la nueva generación, aunque esté dominada por las "Tres Grandes" rel="nofollow" target="_blank" compañías videojuegos, está sufriendo un irrevocable cambio; el jugador ahora puede jugar en un montón de plataformas, ya sea una PlayStation, una Xbox, una consola de Nintendo, un PC, un smartphone, una tablet o incluso una de las nuevas propuestas como Ouya, GameStick o la SHIELD de nVidia.
Resumen: empieza a primar el contenido por encima de la plataforma. A esto se le suma además que los jugadores empiezan a acumular demasiadas consolas a lo largo de la historia. Y si bien esto no tiene nada de malo para el jugador más habitual, el jugador medio prefiere decantarse por un sólo producto y dedicarse a él por completo. De entre ellos, el estudio afirma que el 51% de los jugadores tiene como plataforma principal el PC, mientras que el 30% hace lo propio con las consolas. El móvil habría alcanzado el 13%. Claro que el PC aquí no significa Steam, sino que es la conglomeración de este más usuarios de MMO, Free to Plays como Candy Crash Saga, etc.
No es la primera vez que el jugador se enfrenta a una saturación de hardware. A finales de los noventa el mercado estaba repartido entre las consolas de la generación, los que arrastraban todavía la de la pasada y las que estaban por salir. Entre todas ellas teníamos plataformas como 3DO, Atari Jaguar, la primera PlayStation, Sega Saturn, Nintendo 64, mientras que algunos todavía coleaban con su Super Nintendo o Mega Drive y a su vez veíamos asomarse nuevas propuestas como DreamCast.
Lo que está claro es que cada vez que se produce una saturación de este calibre la historia nos demuestra que algunos nombres tienen que desaparecer al fragmentar tanto el mercado. Pero en esta ocasión cada grupo de plataformas parece orientarse a un tipo específico de jugador. Las "tres grandes" apuestan por el jugador más tradicional, mientras que el PC es un conglomerado de jugadores de todos los estilos, consolas como Ouya buscan un usuario dispuesto a no invertir grandes sumas de dinero, pero jugar de forma tradicional a juegos sencillos y el mercado de los móviles y tablets sigue apostando por los precios bajos y las experiencias rápidas.
Entonces, al fragmentar al jugador, pero todas tener su público, quizá no suframos un crack como el que augura de forma quizá demasiado extremista el informe de Superdata y Digital Rivers. Sin embargo, también es posible que no lleguemos a ver en un futuro próximo ventas tan disparatadas como las que tuvo por ejemplo Nintendo Wii la generación que acaba, por esta fragmentación del mercado. Algunos, incluso, auguran que sea como sea, esta octava generación será la última de todas, apostando por un nuevo sistema digital o en la nube que restara importancia a tener un nuevo hardware. ¿Llegaremos a ver un futuro donde la marca de nuestro reproductor de videojuego no sea tan importante como lo es ahora mismo el de un reproductor de DVDs o BluRays, dando más protagonismo al contenido?
Las conclusiones que podemos sacar es que la cantidad de usuarios de videojuegos ha aumentado, pero a su vez se ha dividido en muchas y cada vez más diversas plataformas de juego. El estudio termina afirmando que el éxito de una plataforma depende de su buen contenido, pero en el caso del hardware dedicado al usuario tradicional, éstas parecen ofrecer prácticamente el mismo software a excepción de unos cuantos juegos y DLCs exclusivos que a su vez no parecen intentar innovar como en otras generaciones más allá de la pura progresión gráfica. Quizá, el crack del videojuego no sea, al fin y al cabo, un asunto financiero, sino un crack creativo.
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