Reinventando Morrowind
Hay que tener presente que Morrowind cumplió hace pocos meses diez años nada menos. La saga The Elder Scrolls obtuvo el reconocimiento que se merecía con esta entrega aún cuando sus antecesores Daggerfall y Arena sentaron las bases de esas mastodónticas miras de Bethesda a la hora de crear entornos inabarcables en un RPG. Además, modeló en gran medida el desarrollo y la organización de las mecánicas que se explotarían y perfilarían en Oblivion y el reciente Skyrim. Sin duda, es uno de los productos más redondos de la saga.
Por ese engrandecimiento que no hace sino crecer con el paso del tiempo, muchos se han embarcado en la titánica tarea de renovar el aspecto del juego aprovechando esas facilidades que el estudio proporciona a los fans para que modelen sus productos a gusto. Por eso nació Morrowind Overhaul.
Resultaría ofensivo llamarlo simplemente mod. El proyecto, con más de un lustro de constantes actualizaciones, es una recopilación de varias mejoras realizadas por diversos usuarios para mejorar el aspecto visual del juego sin dejar de lado la usabilidad de cara al jugador en su instalación. No se imaginan los berenjenales que se pueden formar si se deja la tarea de recopilar e instalar añadidos de forma independiente en nuestras manos. Y no hablamos tan solo de chucherías gráficas en texturas y modelados; Aunque la última actualización oficial del juego data nada menos que de 2008 (no todos los juegos pueden presumir de recibir parches seis años después de su lanzamiento), hay una enorme labor de optimización y resolución de inevitables Bugs dada la absurda cantidad de misiones, personajes y situaciones que pueden darse en la isla de Vvanderfell.
Acaba de liberarse su tercera versión al mismo tiempo que otras propuestas paralelas intentan hacerse su hueco con iniciativas similares. Si bien las mejoras gráficas de Morrowind Overhaul hacen que el juego parezca mucho más contemporáneo de lo que es, no se pueden hacer malabares con un motor de diez años. Por eso nació en 2007 el proyecto Morroblivion, que en este caso utilizando como base Oblivion trasladaba todo el universo del anterior juego al motor Gamebryo, el motor de físicas Havok y el sistema de generación de entornos naturales SpeedTree. El problema de esto es que la labor de desarrollo es inmensamente más grande que si se trabajara sobre el juego original, ya que hay que trasladar todos los mapas, modelos y scripts de uno a otro. Pero bueno, también hay gente a la que le gusta chupar candados, ellos sabrán donde se meten.
La gracia de Morroblivion está en que no se superpone al contenido del juego original, sino que lo expande, por lo que tras su instalación nuestra aventura seguirá desarrollándose en la capital del imperio, y tan solo utilizando unos transportes especiales viajaremos a la isla de Vvanderfell. Todavía no están implementadas todas las misiones, pero la labor de adaptación es realmente buena dadas las diferencias de desarrollo entre ambos juegos.
Pero no acaba la cosa aquí, porque claro, cada lustro aparece un The Elder Scrolls y vuelve a repetirse el cuento de la Lechera. Precisamente desde los foros de Morroblivion han surgido dos nuevos proyectos, atención: Skywind y Obliskyrim, o lo que es lo mismo, trasladar Oblivion y Morrowind al motor de Skyrim. De momento, solo son los mapas trasladados al nuevo motor, pero intuyo que la propuesta acabará unificándose. Como dentro de unos años vuelva a salir el nuevo TES y volvamos a toparnos con algo así esto no se va a acabar nunca.
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