PS5 y Xbox Scarlett: cómo aprovechar al máximo la próxima generación
El mundo ha cambiado, el plato ha girado, los elefantes han dado un paso, Atlas ha tropezado, la tortuguita, tortuguitas, ha asomado la cabecita... o por decirlo de otro modo, la próxima generación de consolas está cada vez más cerca. Mientras esperamos a junio para saber más de Xbox Scarlett y, posiblemente, ya entrados en 2020 para tenerla en las manos junto a PS5, toca plantearnos cambiar nuestra forma de afrontar el mundo del videojuego si queremos sacar el mayor partido a la próxima generación y su catálogo sin dejarnos la cartera en el proceso. Algo que podemos empezar a practicar desde ya si mezclamos sabiamente la paciencia con la búsqueda de ofertas y el estudio de lo que ofrecen las suscripciones.
La situación actual
Ayer daba un repaso a las suscripciones de PS4 y Xbox animandoos a echarle un ojo y a investigar un poquito sus ofertas, un ejercicio práctico con un objetivo muy claro: que comprobárais por vosotros mismos la situación actual del mercado y cómo es posible a día de hoy acceder a títulos tochísimos triple A por poquísimo dinero si somos listos. Por decirlo claro, y no hay forma bonita de decirlo, a día de hoy, si eres usuario de PS4 y/o Nintendo Switch, podéis dar el salto a Xbox One por alrededor de 100 euros y jugar todos sus exclusivos, poneros al día con las sagas Gears y Halo al completo, disfrutar del que para mí es uno de los juegos más bestias de esta generación: Forza Horizon 4 y mucho más.
Dejando malestares integristas a un lado, la realidad a día de hoy es que podíes comopraros una Xbox One Fat de 500 Gb. por unos 80-90 euros y, con 12 euros por el Xbox Game Pass más la prueba gratuita, estar 4 meses apurando todo lo gordo que ha salido exclusivo en la consola más sus precuelas y varios triple A multiplataforma como Fallout 4, Prey, Just Cause 4, Dead Rising 4, Vermintide 2 y un largo etcétera. Una situación inédita hasta ahora en generaciones anteriores y que, para el público consolero, me parece una autentica gozada y una lástima que no funcione en ambos sentido por un PS Now muy celoso de sus exclusivos que deja fuera de su catálogo a Uncharted 4, Spider-Man, God of War, Detroit: Become Human -vale, este ya no es exclusivo- Horizon Zero Dawn etc.
Cautela y meditación
Os suelto el rollo anterior para que entendáis lo importante que es a día de hoy, y más de cara a la próxima generación, meditar sobre los juegos que comprar de lanzamiento y estudiar hasta qué punto resulta conveniente pagar una suscripción en sus periodos de oferta y aprovechar su amplio catálogo no sólo para rellenar huecos que no pudimos jugar y acceder a varios títulos que si no no habríamos probado, sino también para ocupar nuestro tiempo y poder esperar a que los grandes lanzamientos bajen de precio e incluso acaben por entrar en la suscripción.
A los datos que ya manejamos, como la rápida bajada de precio que suelen sufrir juegos de compañía como Ubisoft, Bethesda o, muy a su pesar, EA, debemos unir ahora un estudio de los movimientos de las suscripciones y los tratos con third parties que hacen que sepamos que, por ejemplo, Bethesda tiene buenos tratos con Microsoft y es fácil ver aparecer sus títulos por Xbox Game Pass o que Sony está promocionando a saco su PS VR y es fácil adquirirlo a través de PS Plus si sabemos esperar un poco.
Jugar barato en PS5 y Xbox Scarlett
Tras una generación con un terrible comienzo en el que los usuarios de PS4 y Xbox One estábamos deseando poder gastar los dineros en algo potable, algo me dice que la próxima generación será, afortunadamente, muy distinta. Con una Sony obligada a comulgar con la retrocompatibilidad por los de Redmond no es difícil imaginar un PS Now hipervitaminado y mejorado para hacer sombra a Xbox Game Pass. Dudo que llegue al nivel de incluir sus exclusivos gratis de lanzamiento como sucede a día de hoy en la suscripción de Microsoft, pero sí estoy convencido de que será más que suficiente para tener contento al usuario de PS5 mientras hace tiempo esperando a que tal u otro juego baje de precio o, como decíamos antes, termine por hacer acto de presencia en la suscripción.
Yo lo tengo claro, para la próxima generación toca mutar como videojugador o, si lo preferís ya que está tan de moda, deconstruirnos como compradores frenéticos de día uno y dejar a un lado el ansia de acaparar en pro del disfrute de lo que tenemos ya en la mano. En un año de grandes lanzamientos y grandes batacazos nos debería quedar claro que hay que ser más selectivos con nuestras compras de día uno y recordar que no por dejar pasar unos días, unas semanas o unos meses, el juego va a perder su calidad. Paciencia antes de reservar, saber esperar a las ofertas de las sucripciones, disfrutar de lo que ofrecen dichos servicios y esperar las bajadas de precio serán las máximas para poder sobrevivir económicamente a una generación que, a muchos, nos cogerá con el pie cambiado.
¡Nos leemos!
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