Por fin una campaña con intención en Call of Duty
Por norma general, los modos campaña en los Call of Duty de los últimos años son decepcionantes. La importancia mayúscula del modo multijugador siempre deja atrás a la vertiente individual del título, pero con Call of Duty Infinite Warfare la tendencia parece cambiar un poco. Pero ojo, antes de nada quiero dejar clara una cosa: esto no quiere decir que la Campaña de la nueva entrega sea de una calidad incuestionable, porque no es así (está muy por detrás de lo visto en Titanfall 2, por ejemplo). Es, simplemente, un mejor ejemplo de lo que hemos estado experimentando con la franquicia en los últimos años.
La personalidad de Call of Duty en su modo multijugador es indiscutible. El título encontró un rumbo desde hace años que funciona perfectamente, y que se calca en cada juego con algunas pequeñas diferencias. El modo campaña de Call of Duty Infinite Warfare está muy influido por el modo multijugador, que es algo que siempre se suele echar de menos. Para que lo entendáis, se ha incluido un sistema de progresión muy parecido al que estamos acostumbrados a ver en el modo online, junto a la presencia de objetos, armas y personajes que también hacen su aparición en el modo multijugador.
Hay un detalle concreto que me ha gustado bastante, y es la importancia que tiene tu propio equipamiento. Si recordáis campañas de Call of Duty anteriores (incluso de los clásicos), el armamento que portamos en cada misión siempre está predeterminado por el propio juego. Las misiones en las que hay que llevar un rifle de francotirador, por ejemplo, están perfectamente acotadas y no dejan más remedio al jugador. Incluso hay enemigos que nos obligan a vencer con determinadas armas. En Call of Duty Infinite Warfare no ocurre, y antes de cada misión tenemos que pasar por un menú de creación de clases (exactamente igual al del modo multijugador) donde podemos seleccionar nuestro equipo. Nos dan recomendaciones e ideas dependiendo del tipo de misión, pero nosotros tenemos libertad absoluta.
También se han incluido misiones secundarias, opcionales, de una calidad general menor que las principales pero que nos garantizan la obtención de alguna mejora. Complementos para nuestras armas, por ejemplo, que nos van a venir bien en futuras contiendas. Es decir, ese sistema de progresión que también encontramos en el modo multijugador se aplica en la modalidad individual, y me ha parecido muy interesante. Esta saga también debe encontrar una personalidad en su manera de incluir los modos Campaña, y aunque el de Call of Duty Infinite Warfare está lejos de ser perfecto, al menos se convierte en el mejor visto en la saga desde hace muchos años. Espero que sirva para plantar una buena semilla de cara al futuro.
<< Anterior Siguiente >>