Pokkén Tournament y la violencia en los Pokémon
Llevo unos cuantos días jugando a Pokkén Tournament. No voy a dar una opinión muy sesuda por aquí porque, para ello, mejor leeros el análisis que hizo el überboss Junquera la semana pasada; pero me gustaría que nos paráramos todos un segundo a reflexionar sobre lo que supone este juego dentro de Pokémon. Si lo estáis jugando también, quizá os habréis dado cuenta de algo que a mi me ha costado unos días aislar: es un juego violento de Pokémon.
Entendamos que es violento dentro de los estándares de Nintedo y de Pokémon, claro. No hay sangre, no hay mutilaciones, no hay casi gritos de dolor que podamos identificar, pero hay sopapos inmensos entre criaturas musculadas y más realistas de lo que habíamos visto nunca. Y lo más importante, son sopapos que se dan de principio a fin, esto es, que no hay un cambio de cámara ni una animación entre medias para aliviar el golpe, como ha pasado siempre en otros juegos de Pokémon.
No es que sea tan remilgado como para que esto me impacte. Al final, que Pokkén Tournament adapte tantas convenciones de Tekken hace que asocies la violencia de este con la del otro y te parezca normal que ese uppercat de Lucario a Pikachu no te duela en el alma. Sería otro cantar si hubiera sangre u otra clase de secuela en las criaturas, que han sido retratadas de la forma más realista posible para que violencia y aspecto vayan un poco más de la mano, a pesar de que el segundo set de brazos de Machamp no tiene sentido.
Lo que está claro con Pokkén Tournament es que aquellos que siempre piden un Pokémon más adulto, más maduro, más violento y en 3D; no terminan de darse cuenta de que la saga no está pensada ni preparada para algo así. Recrear a las criaturas que participan en Pokken Tournament debe haber sido una tortura, por ejemplo. Machamp debe haber sido sencillo, sí, pero mantener el equilibrio entre hacer creíble a Pikachu, a la vez que es reconocible, no debe haber sido pequeño. ¿Os imagináis un Pikachu con pelo amarillo bien animado en lugar de con ese aspecto plasticoso que tiene siempre? ¿O con textura en la nariz?
Más allá de pensar en "ey, es verdad, Pokkén Tournament es la primera vez que Pokémon 'pasa a las manos' de forma creíble'" y valorar esa idea de una manera o de otra, casi me agrada que de fondo, al notar eso en el juego, mi punto de vista haya sido: esta saga no puede ser más violenta que esto, ¡no le pega! No concibo un Pikachu que sangre o se rompa la cola peleando, quizá por mi nostalgia, porque me he ido criando con Pokémon o por lo que sea. Con Smash Bros., pensadlo, pasa lo mismo: ¿realmente algún personaje de Nintendo encaja con la violencia estándar de otros videojuegos? Ni Metroid...
<< Anterior Siguiente >>