1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. 3DS

Pokémon Shuffle, Nintendo y el dinero sin valor

Mala entrada en los micropagos
Por Víctor Junquera

Pokémon Shuffle, también conocido como 'el Candy Crush de Pokémon', no tiene tanto del título de King como parece a nivel de juego más allá del 'junta tres' que se remonta a mucho antes de Candy Crush, pero lo tiene a nivel de negocio, y es horrible.

 

Partiendo de la base de que dar al jugador la opción de pagar para evitar esperar me parece uno de los gestos más rastreros que ha podido tener cabida en la historia del videojuego, el problema con Pokémon Shuffle no va en función de que te ofrezca pagar y cuánto, sino en cómo valora el tiempo del jugador y el tipo de tretas que utiliza para intentar engancharte en el mejor momento para que se te pase por la cabeza el pagar. Es un gesto feo hacia los innumerables fans de Pokémon de todo el mundo.

 

Se puede empezar diciendo que Pokémon Shuffle se divide por pantallas en las que el objetivo es capturar a un Pokémon a base de combos de tres o más (se pueden mover los Pokémon por toda la pantalla, no como en Candy Crush o Bejeweled), combos que son "ataques" del tipo de Pokémon que forma el conjunto, que es más o menos efectivo contra el Pokémon a capturar. Hay que reducir su barra de vida en un límite de turnos (o tiempo), y tras ello, un índice de probabilidad de captura, un bonus con los turnos restantes y un poco de suerte, harán que puedas capturar al Pokémon de esa fase, pero aunque no lo captures, continúas. Hecho esto, pierdes un corazón, una 'vida', que se regeneran a razón de una vida cada media hora y que no se nos permiten acumular más de cinco a menos que paguemos. Es decir, cinco vidas cada dos horas y media.

 

Por 47,99€ te compras un Pokémon de verdad y te sobra para unas chuches.

 

Soy bastante fan de este tipo de juegos, no de los F2P sino de los puzles de conecta-3. Siempre que tenía oportunidad me echaba un Rumbling Marbles en las máquinas PhotoPlay 2000 cuando trabajaba en un salón recreativo, y cuando no había mucho catálogo en Nintendo DS pagué 40€ por Zoo Keeper (sí, ese que ahora cuesta 0.99€ para móviles). Y bien hubiese pagado por Pokémon Shuffle un precio acorde como pagué por Pokémon Link Battle, pero sólo si el juego valorase mi tiempo, si esa opción de pagar 47,99€ por 75 joyas de verdad sirviese para jugar absolutamente todo lo que yo quiera. Pero no, ni pagando un gritón de dólares podría llegar a conseguir todo lo que Pokémon Shuffle dice que ofrece, ya que sólo hay trampa tras trampa.

 

Volviendo a los corazones y las horas de juego, la compra de esas joyas con las tarifas que vemos un poco más arriba nos puede dar para muchas cosas. Podemos comprar vidas por packs (a más gasto, mayor descuento proporcional), podemos comprar monedas con las que comprar objetos que nos dan ciertas mejoras o turnos extra, e incluso podemos comprar carísimas Super Balls que aumentan las posibilidades de capturar Pokémon, todo un caramelo para capturar a esa criatura favorita de mucha gente que sospechosamente tiene un índice de captura base extremadamente bajo.

 

Ese es uno de los grandes engaños. Todo parece fácil, todos los Pokémon acaban cayendo a la primera, hasta que llegas a Pikachu, que a pesar de tener un índice de captura normal, por algún extraño motivo requiere más de un intento (tres intentos con más de un 70% de probabilidades en mi caso). Ahí es donde muchos se verán tentados a pagar. Y si no es por Pikachu, descuidad, que no será por Klefki, Phanpy o Surskit, fáciles de cazar, pero sí llegaremos a ver índices de captura ridículamente bajos en los Pokémon más populares como Riolu, Lapras, Mudkip, Zorua, Eevee o sus evoluciones,... Por no hablar de los Pokémon de las fases extra, como Lucario, Zapdos o Charizard, que ahí siguen sin capturar, ya que no veo forma lógica de conseguirlos sin pasar por caja.

 

No están todos, claro. La selección parece estar entre los monos y los populares y sus evoluciones.

 

Así hasta 150 pantallas, de las cuáles muchas duran escasos segundos ya que con un sólo movimiento podemos lograr desencadenar el combo necesario para ganar. Esperar 2 horas y media para jugar menos de 10 minutos siendo optimistas, es un abuso.

 

Y es una pena, porque Pokémon Shuffle daría para muchísimas horas de juego entre subir de nivel a ciertos favoritos, capturar todo lo capturable y mucho más, pero te echa constantemente para atrás con la idea de que tienes que parar o pagar. Incluso otro de los engaños incurre en esa selección automática, una selección que hace que el juego no sea más fácil sino que sencillamente te dé lo justo para superar un nivel, pero sin hacerlo bien. La variedad de criaturas atrapadas permite crear equipos muy diferenciados que no sólo se basan en la compatibilidad de tipos, sino que también hay que tener en cuenta combos, habilidades y megaevoluciones, y cuando Pokémon Shuffle te da opciones de selección automáticas, no te da las óptimas, forzando, por ejemplo, el uso de una megaevolución aunque no haga ningún bien en esa pantalla en concreto.

 

Todo esto suena raro viniendo de una compañía que consigue dar sentido a temas escabrosos como el DLC gracias a Mario Kart 8 y que hasta ahora valoraba por encima de todo al jugador. Es como si quisiese hacer demasiado evidente que este no es el camino a seguir y que nos tenemos que quitar la idea de ver a Nintendo en un mercado como el de los juegos de móviles, porque esto es sencillamente asqueroso.

 

Que un juego te haga pagar por evitar esperar es algo feo, que te incentive a pagar aprovechándose de tus más que probables gustos es aún peor, pero lo peor de todo es ver cómo un dinero invertido se esfuma completamente, sólo a cambio de un rato de entretenimiento vacío. Un dinero cuyo valor no puedes volver a reproducir, que no recordarás y que ni mucho menos puedes recuperar. Pagar a cambio de nada. Una estafa camuflada en toda regla.

 


<< Anterior Siguiente >>