Overwatch y Battleborn tenían que haber sido free to play
Lo que empezó siendo un 'parece que' en boca de los entendidos de la materia con el lanzamiento de la beta cerrada de Battleborn parece haberse convertido en toda una certeza tras haber disfrutado de la beta abierta de su rival más directo, Overwatch, con el que ya desde el principio se sabía que la disputa no iba a estar igualada. Tal vez por eso, vencedores y vencidos a un lado, me llama la atención que ambos juegos han cometido el mismo fallo garrafal:
Overwatch y Battleborn deberían haber apostado por el free to play
Y ojo, no soy yo quien lo dice -o no sólo yo, al menos- sois vosotros los que en comentarios, reseñas, tuits y redes sociales estáis mandando ese mensaje a Gearbox y a Blizzard: 'vale, no está mal, pero tiene demasiados fallos, demasiadas cosas que arreglar, y la ausencia de un modo campaña -el modo historia de Battleborn no deja de ser un popurrí de misiones de multijugador a jugar solo o con amigos, sin chicha ni limoná- y la presencia de otros juegos que ofrecen lo mismo bajo el formato de negocio free to play hace que no vaya a gastarme 60 euros en este juego'.
Desengañémonos, tanto Blizzard como Gearbox lo han hecho mal, y en este duelo que se han sacado de la manga en el que los padres de Borderlands estaban obsesionados por plantarle cara a los abuelos de World of Warctraft parecen haber olvidado que la batalla no es contra el rival, sino contra uno mismo para intentar ofrecer más al usuario y conquistar así suscorazones... y sus carteras. Bonita la excusa de obviar el f2p para que así todos los jugadores tengan las mismas opciones y los mismos contenidos, pero sigue sin justificar el precio y el cobro de algo que, una vez más, va a venir con DLCs y pagos en la aplicación.
No se debe jugar al despiste
Los usuarios medios somos ya perro viejo en estas lides de las mentiras de las compañías, y tratar de jugar al despiste con nosotros es ganarse a pulso la falta de interés en tu negocio. El concepto f2p ha estado dando vueltas alrededor de Battleborn y Overwatch durante demasiado tiempo, y por mucho que 'no hubiera nada asergurado', que sí que lo hubo, y por mucho que una compañía pueda cambiar de opinión a mitad de promoción -ahí tenéis por ejemplo DayZ y H1Z1, y mirad lo bien que les ha ido, ironía mode on-, lo de terminar cambiando de parecer y sacar un MOBA a 60 pavazos no es la mejor maniobra de la historia del videojuego.
El problema, básicamente, es que lo mires como lo mires, la idea del MOBA de pago hace aguas por todos lados. No es ya cuestión de Team Fortress 2 o de 'me habéisvacilado'. Ná. Es una simple cuestión de ver cómo va a ir la cosa: si de verdad, como aseguran ambas compañías en su momento, tanto Battleborn como Overwatch van a venir 'completos en el disco con todos los jugadores, escenarios y demás, y todos los mapas y personajes serán gratuitos'. Cosa que parece que no, pues ya tenemos a una Activision Blizzard que habla de compras durante el juego en lo que respecta a temas estéticos y posibles potenciadores, y a una Gearbox que nos ofrece un pase de temporada para cinco DLCs futuros que incluirán, entre otras cosas, una misión del modo historia.
Ya veremos como acaba todo
Pero ni ese modo historia centrado en las mismas premisas que los modos online de Battleborn ni ese rollo de 'esto es lo mejor para todos porque así compartís contenidos' va a convencer a quienes ya han decidido ahorrarse la compra para los muchos grandes títulos que tienen previsto ser lanzados en los próximos meses.
¿Me preocupan Overwatch y Battleborn? Pues la verdad es que sí. Ya sabemos que cuando un MOBA pierde el interés del jugador la cosa hace aguas antes o después -oh, Hola Evolve- y que las compañías no son muy de mantener el producto una vez le han sacado todo el beneficio que le tienen programado. Habrá que esperar, por supuesto, y ojalá me equivoque, pero sigo pensando que este mareo de ahora sí y ahora no con el tema de la monetización y esa apuesta final por el formato tradicional con pagos va a terminar pasándole factura a las compañías... y al jugador.
¡Nos leemos!
<< Anterior Siguiente >>