One Piece Burning Blood tiene un buen combate
One Piece Burning Blood no está nada mal, su demo se puede disfrutar para comprobarlo. El videojuego no quiere ser un frenético uno contra uno en el que machacar sin parar los botones, y se agradece, es una apuesta similar a la de Naruto Shippuden Ultimate Ninja Storm 4 pero más pausada, sin tantas facilidades para escapar y acercarnos al enemigo, y con muchas opciones para alargar el enfrentamiento directo.
En la demo podemos jugar con Ace, Franky, Naruto y Aokiji, y jugando con ellos podemos destacar cosas muy positivas: los combos funcionan bien, son sencillos en su manejo y realización, son contundentes y permiten combinar golpes normales con las habilidades de las frutas del demonio, añadir apoyo de nuestros compañeros e incluso evitarlos usando nuestros poderes. En los Naruto de CyberConnect2 podemos evitar una embestida enemiga con la técnica del cambiazo, aquí podremos dar uso al elemento de fuego o hielo, por ejemplo, con el que está formado nuestro cuerpo para que los puñetazos nos hagan cosquillas. Con ello se da lugar a un combate muy entretenido y que además tiene otra ventaja: al ser equipos de 3 el combate acaba siendo técnico y con la estrategia como protagonista: hay que guardar fuerzas, asegurar el instante en el que cambiamos de personaje y aprovechar las ayudas de estos cuando nos están friendo a golpes.
El problema, de todos modos, vuelve a aparecer cuando estamos en la distancia. Echamos de menos más técnicas para movernos mejor y no solo un pequeño dash que se activa en combinación con la guardia, y personajes como Franky abusan de estar lejos de nosotros con sus disparos. En las distancias cortas, se notan también los desequilibrios. Aokiji tiene las piernas largas, obteniendo un rango de ataque tremendo y cuenta con movimientos de congelación que te tiene parado mucho tiempo, con lo que te puede meter el especial las veces que quiera. Que sean batallas a tres tiene otro problema: sí, los combates se nutren de cierta estrategia, pero a veces se acaban haciendo demasiado largos por no poder acercarnos más deprisa a nuestra rival.
One Piece Burning Blood tiene sombras pero también puntos brillantes: cuando estamos cara a cara contamos con opciones interesantes para el intercambio de puños: poderes de la fruta del diablo, poderes especiales, golpes normales, guardias, rompeguardias y pasos laterales para esquivar. El juego te pide que para ganar hagas un buen uso de todas ellas en combinación, y hacerlo es muy divertido y satisfactorio. Se adivinan ya desbalanceos, pero la opinión general es positiva porque el núcleo jugable cuenta con estos momentos chulos, lo que es una lástima es que no se potencien más.
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