No Man's Sky y la mezcla de géneros como evolución
A un día del lanzamiento de No Man's Sky es mucha la información que el equipo de Hello Games ha vertido acerca de su prometedor título. Información que no siempre ha calado del todo bien y que, dependiendo de los gustos del usuario, ha despertado algunas alertas en determinados sectores: ¿Uso de armas? ¿Ambición de shooter? ¿Minería? ¿Lenguaje alienígena? ¿Corta duración?
La ambición de Hello Games parece haberse disparado a lo loco tras el primer anuncio de No Man's Sky hace ya un par de años. Lo que empezó siendo un 'simple' simulador de exploración espacial en un universo de creación procedimental que nos daba una duración de juego de varias generaciones -'Algún dia terminaré el juego que comenzó el tatarabuelo allá por el 2016'- pronto incluyó una campaña, posibilidad de multijugador, comercio, ataques, gestión de recursos, presencia alienígena, facciones, combate aéreo, armas láser, entornos hostiles y tantas, tantas cosas nuevas que al final uno ya no sabía qué pensar.
Parece que los apenas 6 Gbs que dicen en Hello Games que pesará No Man's Sky dan para mucho, mucho material, muchas jugabilidades y muchas experiencias de juego -por no hablar de ese universo cuasi infinito que permite mezclas imposibles de vida, fauna, flora, naves, especies etc etc-, pero Sean Murray nos ha dejado tranquilos en un aspecto: No se trata de hacerlo todo, sino de adaptar el juego a tu jugabilidad.
Bien por las opciones
En las últimas semanas los planes de Hello Games con No Man's Sky han ido concretándose hasta llegar a esta filosofía que parece cercana a Fallout pero con el giro de tuerca de la exploración espacial. Uno no puede menos que alegrarse, pues ya estaba temiendo que al final nos encontraríamos ante un Star Wars Battlefront y no ante ese juego inmersivo de paciente exploración que prometía romper esquemas.
¿Son las armas y los combates un problema para lo que prometía No Man's Sky? Pues no lo creo, especialmente si tenemos en cuenta que el componente sesudo, el elemento que logró enamorarnos a los amantes de la ciencia ficción pura de Clarke y Asimov, sigue ahí, fresco e inmutable, para que podamos soñar con revivir las aventuras leídas en nuestras novelas favoritas. ¿Que ahora hay elementos de Larry Niven, John Scalzi o Ron Hubbard? Pues bienvenido sea, no todos los años puede ganar los Premios Hugo algo como Flores para Algernon, de vez en cuando hay que dejar que Ender pegue un par de tiros para que el género se refresque.
La mezcla como evolución
Más allá de lo que nos guste, nos llame o nos interese, lo importante es que el género evolucione, y en este sentido una de las mejores formas es la mezcla de elementos, eso sí, bien integrados en el todo del juego. Alguien le puso un palo a un caramelo e inventó el chupachups, y alguien le puso un palo a un trapo e inventó la fregona. Alguien le puso elementos de rol a un juego de disparos e inventó el RPG Shooter, y alguien metió multijugador a un juego de peleas y terminó inventando el MOBA.
La mezcla de géneros y las opciones no son mala idea cuando el producto inicial permanece integro, con su naturaleza intacta. a pesar de los añadidos. Sean Murray dice que No Man's Sky mantiene su esencia, y yo quiero creerle. Si esto es así, si todavía puedo seguir sintiendo que vuelo por el espacio en un velero solar o soy el primer humano en poner el pie en la superficie de un planeta, entonces todos los añadidos que hayan querido hacerle el juego no serán sino opciones, posibilidades con las que desahogarme un poco cuando esté cansado de 'flotar sentado en mi pequeña lata, lejos del mundo'.
¡Nos leemos!
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