Nintendo Switch ya ha vendido más que Wii U en Japón. ¿Y ahora, qué?
Retrocedamos a mediados de diciembre, antes de ganar unos kilos y abrir regalos. Hace cosa de un mes se anunció que Nintendo Switch ya había superado los 10 millones de ventas, unas cifras que había que comparar con otras para entender cuán buenos habían sido los primeros diez meses de la consola. Un indicador válido era saltar a las ventas de PlayStation 4, una consola que tardó solo una semana menos en sumar la primera decena de millones.
Son cifras muy buenas, sin duda, pero siguen estando por dejabo de grandes superventas como Wii, que alcanzó la friolera de los 20 millones de unidades vendidas en su primer año. Con esa perspectiva, hay que releer la información del rotativo japonés Famitsu en la que se lee que Nintendo Switch ya ha vendido más que Wii U en todo su ciclo en Japón (4 años si contamos la producción, 6 si hablamos de su tiempo a la venta) y, del mismo modo, analizar la perspectiva de la empresa analista GBH Insights en USA Today, donde se habla de una consola que ya podría rondar los 15 millones en todo el mundo.
Hay éxitos incuestionables como las 900 mil consolas vendidas entre noviembre y diciembre de 2017 en Japón, pero en cuanto a cifras globales habría que esperar al próximo informe trimestral de Nintendo. Imagino que, para marzo, sí se habrán alcanzado esos quince millones de consolas vendidas en todo el mundo; puede que incluso más. Esto coloca a los de Kimishima en una situación privilegiada, siendo una marca fuerte, conocida por la mayoría de consumidores, y que se reintroduce en la competencia global en un momento en el que Sony y Microsoft parecen haber entrado en una disputa sin cambios a corto plazo. Toca sacudir la colmena, a ver qué pasa.
No olvidemos que 2018 será el año en el que el online de pago de Nintendo tomará forma. Xbox viene como la abanderada de ese sistema mientras que PlayStation ha decidido subir precios, sacar músculo, hacer que esos casi 70 millones de ventas pesen. También, que los próximos doce meses definirán el apoyo y la potencia de Switch con las third parties; FIFA, NBA 2K y DOOM han demostrado que la máquina puede con algo más de lo que se pensaba, pero ahora falta que el resto de estudios tomen el testigo y se atrevan a dar el salto. Creo que la perspectiva ascendente de ventas será un punto muy a favor en este aspecto.
Nintendo Switch ya parte como la consola diferente, y su prometedor futuro la sitúa en una posición de poder que puede afectar a todo su entorno, competencia incluída. Tiene un catálogo fuerte, pero a diferencia de Wii U esta vez puede apoyarse en estrenos que no llevan el sello de la casa. Dependiendo de lo que se decida hacer con ella, estoy convencido que cerraremos el año de maneras muy distintas. A ver con qué nos sorprenden los encargados de seguir haciéndolo.
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