Murdered: Soul Suspect; la aventura gráfica se renueva

¿Nunca os habéis preguntado por qué el género de las aventuras gráficas se resiste a irse? Sí, porque es maravilloso, pero no sólo por eso. La aventura gráfica esconde una manera de jugar tranquila, sosegada y que invita al jugador a disfrutar de lo que ve, interactuar y sacar sus propias conclusiones. Es un estilo de enfrentarse al videojuego tremendamente inmersivo y atrayente. Los escenarios cobran un protagonismo brutal, se atiende a la trama de una manera soberana y se escudriña cada detalle como si nos fuera la vida en ello.

 

Aunque sea un género que no se ve tanto como se debería a día de hoy (sí, hace falta más), sí que se aprecia su influencia en la estructura de algunos de los juegos más famosos de éstas y otras generaciones. Sin ir más lejos, el primer Resident Evil es una aventura gráfica ¿en qué se diferencia con otros como The Monkey Island? Pues en poco, como mucho en la acción; pero incluso en ésta has de pararte, pensar y luego actuar, como si los enfrentamientos, en realidad, fueran otro puzzle más. Un esquema de juego que marina a las mil maravillas con el terror y que se malogró con el avance de la saga hasta nuestros días.

 

 

Tirando de aventura gráfica, se fabricaron los títulos de David Cage, que más que plantearse como aventura gráfica, a ello le acabó llevando el ritmo de juego marcado. Títulos como los que corresponden a la saga Bioshock, en especial Infinite, te hacen pararte ante la gente que puebla Columbia, escuchar y montar las piezas del puzzle que es la ciudad, aunque en tu cabeza. Una decisión de diseño extraña, porque es un juego de acción, pero te hace frenar y jugar como aventura gráfica en demasiadas ocasiones que son, por otra parte, las mejores del título.

La verdad, es que no se me ocurre un mejor género para facturar una historia. Predispone al jugador a leer y a escuchar de una manera mucho más efectiva que un RPG, ya que en éstas ni siquiera tenemos esa necesidad de conseguir más nivel o vencer a un enemigo final, no, en una aventura gráfica cada instante es un logro, es como leer un libro. No sentimos un mayor gozo por haber llegado a la página 200, sino que lo recibimos tras cada página de calidad leída.

En este contexto nos llegará la, quizás, última aventura gráfica con ganas de retorcer y aprovecharse de las virtudes del propio género: Murdered Soul Suspect, que nos conducirá a una aventura meditativa con tintes paranormales apoyándose en una inspirada y macabra ambientación. La clave será investigar quien nos mató, recabar pistas e hilar los entresijos del juego. Un título que cuenta con una pinta fantástica ¿Y es una aventura gráfica? Lo es de corazón. Ayer mismo confirmaron que podremos disfrutarlo también en PS4 y Xbox One, a partir de junio.
En esta generación que se va, hemos vivido una discreta pero potentísima transformación de un género vetusto que ya lo quisiera para sí el de la acción. El futuro no puede ser mejor para una manera de entender los videojuegos tan personal. La aventura gráfica ha muerto. Viva la aventura gráfica.

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