Mirror's Edge con Xbox Live Gold es algo glorioso

Esta semana se desvelaron todos los juegos que los suscriptores de Xbox Live Gold podrán disfrutar durante el mes de septiembre, tanto en Xbox One como en Xbox 360 (aunque estos últimos son retrocompatibles, así que también podrán jugarse en la consola de nueva generación). Aunque casi todos son dignos de mención, yo voy a quedarme con Mirror's Edge por razones que ya he expuesto en el pasado, pero que precisamente ahora tienen mucho más sentido descubrir.

 

Este mismo año pudimos disfrutar de Mirror's Edge Catalyst, con una propuesta que para mí terminó convirtiéndose en una de las decepciones del año. Todo lo que funcionaba en el primer Mirror's Edge se echaba por la borda con la nueva concepción de un mundo abierto totalmente innecesario, que obligaba a repetir infinidad de veces los mismos recorridos para alcanzar los puntos de inicio de misión, que en ocasiones también utilizaban esos mismos puntos de conexión en el mapa por la ridícula cantidad de posibles caminos que poder utilizar en un entorno abierto que se siente muy cerrado. No solo es que no supere a la obra original, sino que es inferior.

 

 

Por eso mismo, si habéis podido jugar a Mirror's Edge Catalyst o finalmente decidisteis no hacerlo por este tipo de críticas pero os llama la atención la propuesta, no dudéis ni un segundo en haceros con Mirror's Edge el mes que viene si sois suscriptores de Xbox Live Gold. Este título sí aprovecha al máximo las posibilidades jugables de Faith y los escenarios son capaces de explotar las dos virtudes que en su momento consiguieron enamorar a tantos jugadores: buen diseño de niveles que en ocasiones facilita la fluidez de movimientos (dejando momentos espectaculares) y escenarios que se convierten en puzles donde el jugador debe descubrir el camino que tomar mientras sigue disfrutando de las habilidades de parkour de Faith.

 

Son misiones lineales, pero muy intensas y con un estilo artístico increíble. Descubrir un nuevo escenario es una gozada, al igual que ponerte a realizar tus movimientos por él, hecho que también se pierde en Mirror's Edge Catalyst al recurrir en tantas ocasiones a los mismos lugares una y otra vez. En definitiva, si no habéis tenido la oportunidad de disfrutar del primer Mirror's Edge hasta ahora no dejéis pasar la oportunidad, y si ya lo habéis hecho siempre es una buena excusa para recordarlo o para disfrutar de él en Xbox One.

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