Mew-Genics, la nueva locura del Team Meat

Es uno de los estudios más interesantes hoy en día y no, no lo digo desde un púlpito amorrado a unas gafas de pasta. El Team Meat ha anunciado que su nueva criatura se llama Mew-Genics del que sólo han dado tres detalles: "Será un juego con contenido creado de manera aleatoria, extraño y tendrá gatos". ¿Alguien da más?

 

Lo de llenar de flores al Team Meat no es por intentar ser más cool que nadie. Con dos títulos a sus espaldas que han captado la atención del mundillo jugón, más allá de los locos apasionados por el juego indie, el equipo compuesto por Edmund McMillen y Tommy Refenes se acerca, por concepción, a un estudio de 8 bits.

 

En especial McMillen, que no contento con el éxito de Super Meat Boy se lanzó a programar The Binding of Isaac, esa mezcla de arcade rolero que trajo consigo una polémica absurda cuando Nintendo decidió banear el juego de la eShop por una posible controversia religiosa.

 

 

Polémicas aparte, tanto el Team Meat en conjunto como por separado tiene una marca de la casa muy indie pero que están explotando con excelentes resultados: poner la jugabilidad por delante con unas dosis considerables de gore y ambientaciones macabras para dar al jugador adulto aquello que quiere: diversión inmediata sin recurrir a fuegos de artificio. Y lo hacen con una cadencia de lanzamientos que les permite estar en el mercado cada poco tiempo. Como decía, tiene un cierto parecido a estudio ochentero de aquellos que, entre un par de locos de la programación, podían sacar adelante proyectos en unos cuantos meses.

 

¿Van a ir los tiros por esa dirección en Mew-Genics? Todo parece indicarlo. McMillen se ha desmarcado diciendo que "es el proyecto más extraño" en el que ha trabajado, y que eso ya es "mucho" viniendo de él. Os recordamos que los tres pilares en los que se basa el juego que han anunciado son la generación aleatoria de contenidos, el hecho de que será un juego "raro" y la aparición de gatos.

 

Puede ser interesante esa generación aleatoria de escenarios, un concepto muy ochentero de recreativas como Pengo (o del mismo Fred, en nuestro país) y que ha caído en desuso con los años en pos del diseño de niveles preestablecidos. Eso sí, lo de los gatos no hay por donde cogerlo aunque os digo una cosa, mientras esté en registros similares a los de Super Meat Boy, yo me doy por satisfecho.

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