¿Merece la pena The Elder Scrolls V: Special Edition?

Ya tenéis publicado el análisis de The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition, pero mientras en el inmenso texto he intentado hablar del juego para novatos y veteranos de las tieras de los dragones, los vampiros y los elfos oscuros, en este texto quiero centrarme en la pregunta que todos os estaréis haciendo y que yo mismo me hacía antes de recibir una copia del juego para análisis: '¿Merece la pena el desembolso para volver a jugar algo que ya he disfrutado en su momento?'. 

 

Lo primero, por tanto, es destacar que en esta ocasión el juego no lo he comprado, sino que lo he recibido. Lo digo no por fardar como algunos compañeros de otras páginas, sino porque considero que tenéis que tener todos los datos antes de valorar si váis a comprarlo o no. Si tenéis PC la cuestión está fuera de toda duda: descargarlo gratis si ya tenéis el original o compradlo si nunca lo habéis jugado, es un imprescindible para todo amante de los juegos de rol de mundo abierto. Si por el contrario tenéis consola y ya lo habáis jugado en PS3 o Xbox 360, hay una serie de cosas a tener en cuenta:

 

 

Los cambios

Si esperáis grandes cambios en el mundo de Skyrim la respuesta es que sí, los hay, y no, no los hay. Me explico: en lo que respecta a los gráficos, las mejoras se notan sobre todo en el entorno con unas texturas mucho mejor conseguidas, una fauna más viva y presente que nunca y una vegetación que hace que uno de los puntos más flacos de la versión original del juego, su aridez, dé paso a un mundo mucho más bonito y creible. Poblados más agradables, montañas menos anguladas y todo un mundo que a pasado con buena nota el examen de su versión 2.0.

 

Los gráficos de las skins de los personajes, sin embargo, siguen sin dar el salto espectacular que ya han logrado dar varios mods en PC y Xbox One: las mismas caras pétreas de Bethesda, las mismas ropas un poco cogidas por los pelos y unos monstruos y criaturas que sí, han mejorado pero sin ser como para tirar cohetes si lo comparamos con los entornos. 

 

Finalmente hay que aplaudir la mejora de los tiempos de carga, especialmente si le metemos algún mod que nos permite seguir jugando mientras se carga el entorno, la distancia de dibujado y la sensación de un clima mejorado, un viento más físico y una lluvia que, sin llegar a la maestría de la lluvia en Mafia III desfigurando luces y entornos sí que resulta más creíble gracias a algunos efectos que, una vez más, podemos potenciar mediante mods. 

 

 

Los mods

Lamentablemente en este caso hay que decir que la versión de Playstation 4 sale perdiendo por goleada, mientras que la versión de PC ya tenía soporte 'infinito' para mods, por lo que la cosa no ha cambiado tanto. La versión que sale ganando en esto, por tanto, es la de Xbox One, que permite por primera vez los mods de calidad de Skyrim en consolas con nuevas campañas, retos, aventuras, escenarios y mejoras, incluido el parche no oficial que arregla todos los bugs, no disponible en Playstation 4. 

 

Playstation 4, por su parte, se queda algo coja, aunque una vez aceptemos que no vamos a tener grandes mods sí que podemos aprovechar cosas como nuevas líneas de diálogo, mejoras en las texturas, mejores efectos de clima, un mayor nivel de dificultad, heridas mortales o, al contrario, dos anillos de carga que nos permiten llevar mucho más peso encima y jugar con la letalidad del compotamiento animal para que no todo bicho viviente nos ataque nada más vernos. 

 

 

Una excusa para volver a jugar

Dejando a un lado los mods y los cambios, lo cierto es que The Elder Scrolls V: Skyrim Special Edition sigue sendo una estupenda excusa para volver a jugar a un juego que permite mil vueltas gracias a la libertad de acción y que hace que en esta segunda vuelta nos atrevamos a cambiar de personaje y probar rutas alternativas a las que utilizamos hace ya cinco años. En mi caso he abandonado a mi Imperial comerciante y me he hecho un elfo oscuro ladrón que da gustico na más mirarlo, cambiando mi actitud neutral por una más ofensiva y permitiendo a mi personaje disfrutar más que la anterior ocasión solazándome en mi estado de hombre lobo y vampiro y aprovechando para apurar las expansiones que, en su momento, pasé de prisa y corriendo. 

 

Porque esa es otra, junto a las mejoras gráficas, los mods y los tiempos de carga, la edición especial de Skyrim viene con sus tres expansiones desde el principio, lo que nos permitirá exprimir al máximo sus posibilidades para lograr mejor equipo, habilidades, favores y riquezas que luego podremos aprovechar en la campaña central como Sangre de Dragón.

 

Resumiendo: Si me preguntáis directamente os diré que sí, Skyrim Special Edition es una compra interesante aunque ya lo hayáis jugado anteriormente, si bien sigue teniendo algunos bugs cque son para enfadarse, y mucho. Sirve para volver a la región más gélida de Tamriel, viene con mejoras visuales más que tangibles y, para colmo, trae todos los contenidos para que podáis disfrutarlos desde el primer día sin necesidad de esperar a que salgan cuando ya hemos terminado la historia principal. Ojo, sigue siendo un juego de hace cinco años y algunas cosas como la IA siguen siendo muy Bethesda, pero el amplísimo mundo, los bellos parajes y esa mítica libertad de hacer lo que nos de la gana siguen siendo un estupendo aperitivo mientras esperamos a que los de Maryland den el paso y anuncien al fin un nuevo The Elder Scrolls. 

 

¡Nos leemos!

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