Mass Effect 2 continúa siendo el mejor Mass Effect
Después de pasar decenas de horas en una nueva galaxia con Mass Effect Andromeda y de deciros en más de una ocasión que la última iteración de la franquicia me parece la peor, llega el momento de comentaros cuál me parece la mejor. Efectivamente, Mass Effect 2, la segunda entrega de la trilogía original con Shepard y sus compañeros, para mí, es el título más redondo de esta franquicia y, probablemente, el mejor videojuego que ha desarrollado BioWare hasta el momento.
Hace unos meses tuve la oportunidad de volver a disfrutar de la trilogía Mass Effect original al completo y de forma seguida, lo que me sirvió para sacar nuevas conclusiones que en su momento (hace ya unos cuantos años) se me escaparon. El propio contexto, más actual, y poder ir observando los cambios introducidos por el estudio de desarrollo en cada juego prácticamente al instante te otorgan una perspectiva muy diferente. Y sí, sin lugar a dudas tendría que quedarme con Mass Effect 2 como la obra más redonda de todas.
Resulta curioso, porque una segunda parte de una trilogía es muy complicada de plantear. Hay que tener en cuenta que se trata de un producto que no nace para servir como inicio ni tampoco como desenlace, pero que debe tener el condimento adecuado para dar sentido tanto a uno como a otro. Podemos entenderlo como el relleno de un bocadillo: es la parte fundamental para que el mordisco sea sabroso, pero es imposible disfrutarlo del todo sin los dos trozos de pan que lo recubren. BioWare, con la libertad de no tener que afrontar la tremenda presentación de un nuevo universo muy rico en datos e información y sin tener que elaborar una conclusión, supo dar la consistencia adecuada para que la aventura sea la más satisfactoria de todas, siempre a un nivel subjetivo y personal.
Precisamente, creo que esa zona de confort es la que beneficia enormemente a que la experiencia sea tan satisfactoria. Al haber cumplido ya con la presentación de rigor en Mass Effect y con la tranquilidad de saber que la conclusión llegará en Mass Effect 3, BioWare hizo lo que mejor saber hacer en Mass Effect 2: explorar los personajes y mundos que componen su universo. De esta manera, nos encontramos sin lugar a dudas con las mejores conversaciones, diálogos y posibles relaciones de toda la franquicia. Aquí es donde verdaderamente conocemos a nuestra tripulación, cuando nos hacemos compañeros y cuando descubrimos todo sobre ellos. Me sorprendía a mí mismo recorriendo la nave siempre que podía en busca de mis ya amigos, aunque no tuvieran nada que contarme, simplemente para cumplir con la tradición del saludo. Incluso la construcción de esos personajes, soberbia en muchos de los casos, invitaba a completar esas misiones secundarias que quizás no eran las más inspiradas, pero que al menos sabían ofrecer un suculento premio al completarlas: más momentos íntimos con ellos.
Es algo que no está tan explotado en el primer Mass Effect y que tampoco sabe llevar del todo bien Mass Effect 3, teniendo en cuenta que en la mente de todos los personajes no están sus propios problemas personales, sino la enorme tragedia a la que se enfrentan de forma directa. Mass Effect Andromeda, ni qué decir tiene, tampoco consigue acercarse para mi gusto lo más mínimo al nivel de Mass Effect 2, a pesar de ser un título con unos cuantos años más.
Cuando pienso en Mass Effect como experiencia general -y sé que muchos amigos lectores lo harán de la misma manera- pienso en esos momentos de conversación con la tripulación. En ese sistema de diálogos que a diferencia de Mass Effect Andromeda sí te permitía actuar de una forma libre, invitándote a hacerlo por la propia realidad y veracidad que desprenden sus personajes en la nave, cuando se desnudan de forma figurada y literal al tratarse de relaciones naturales, comprensibles y reales. Y en ese sentido, Mass Effect 2 cuenta con lo mejor de la saga.
<< Anterior Siguiente >>