Magic Duels Origins es lento
La primera vez que me lo presentaron, me pregunté hasta qué punto sería Magic capaz de competir contra Hearthstone, que es lo que ahora mismo está pegando fuerte. Después de todo, ambos son juegos de cartas, de un extenso universo y con un gran número de público. La segunda vez que lo vi, más detalladamente, comencé a razonar: Magic Duels Origins debería tener un público muy diferente al juego de cartas de Blizzard. Magic tiene su propio universo incluso entre los jugadores. Con un público tan específico, no debería suponer una apuesta arriesgada. El problema llega cuando parte de ese público ha probado Hearthstone. Las comparaciones son odiosas, pero inevitables.
El Free To Play de Wizards y Hasbro pretende ser el heredero de Duels of the Planeswalkers, llevándonos al origen de los Caminantes de Planos, reiniciando el concepto de Magic, pero sin abandonar el juego físico, con más de 20 millones de jugadores. También hay sitio para los recién llegados, gracias a un tutorial que avanza contigo o el creador de mazos. Pero, si yo, después de muchos años como jugadora, he visto una barrera invisible entre Origins y mi persona, no me quiero imaginar qué supondrá el juego para alguien que no tiene ni idea. Dejando a un lado todo el universo, la historia, o las cartas en sí, voy a centrarme en lo que parece un pequeño detalle, pero es muy importante: la lentitud.
Si bien la idea es bastante buena, ya que nos habla de seis personajes muy conocidos en este universo (Gideon Jura, Chandra Nalaar, Jace Beleren, Liliana Vess y Nissa Revane), y cuenta con un modo bastante peculiar (el Gigante de dos cabezas), a Magic Duels Origins le falta algo fundamental en los juegos de hoy en día: Rapidez, dinamismo, velocidad. Después de un juego como Hearthstone, que se hace ameno precisamente porque las partidas suelen durar entre 5 y 10 minutos como mucho, es normal que el trabajo de Wizards se nos quede un poco grande en lo que a tiempo se refiere.
A pesar de esta queja, la lentitud de Origins está justificada. La principal causa de ella es que cada turno es mucho más profundo que los turnos de Hearthstone, ya que tiene distintas fases, además de que se puede actuar en el turno rival. Pero hay otra lentitud, más allá del propio juego, que también ha sido clave para no conseguir desbancar a Hearthstone (o acercársele) en este primer mes de nacimiento. Hablo de su lanzamiento. Y, hablando mal y pronto, éste ha sido una mierda. No han sabido concretar las fechas de lanzamiento en cada plataforma, pero tampoco han sabido presentarlo. Falta de previsión, escasos anuncios, la publicidad... El evento de Origins fue genial, lo pasé muy bien, pero a un mes de que saliera el juego todavía no nos daban una fecha exacta. Incluso el mismo día que salía para Steam, en la plataforma de Valve no se anunciaba absolutamente nada. Y eso, se nota.
Me gusta pensar que, a pesar de los años que lleva Wizards entre los dos mundos, el digital y el físico, han tenido errores de novato. Errores con solución, o eso es lo que espero. Pero, sí, si vienes de Hearthstone, ante la lentitud y la calma que hay que tener en Magic Duels Origins, no durarás mucho tiempo.
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