Los videojuegos sacan notable en las aulas
Esta semana en Madrid se han dado a conocer los resultados del primer estudio nacional de la Asociación Española de Distribuidores y editores de Software de Entretenimiento, sobre el uso del videojuego en las aulas.
Un estudio que analiza la percepción de padres y profesores de niños entre 5 y 12 años, sobre el uso del videojuego como método educativo y contrasta con la errónea idea generalizada de que la sociedad sigue dándole la espalda a este sector del entretenimiento como complemento educativo que, como afirma Carlos Iglesias, secretario general de aDeSe: “Más allá de la vertiente de ocio, la industria del videojuego comienza a llegar a otros ámbitos como la educación, puesto que el valor social de esta industria cultural es creciente”.
A partir de una muestra de 500 profesores encuestados de primaria de colegios públicos, concertados y privados, se concluye que un 75% de estos, a nivel nacional, considera que los videojuegos tienen una gran capacidad pedagógica y su introducción en el aula puede funcionar como un estimulante método de enseñanza. Es más, uno de cada tres de los profesores consultados los ha utilizado como herramienta didáctica, con una intención de repetir en el 99% de los casos y con una valoración positiva o muy positiva del 96%. También se observa que el rango de edad de los profesores que utilizan videojuegos en el aula es más variado del que podríamos imaginar, siendo más cotidiano en personal docente menor de 39 años.
Los motivos por los que un profesor añade el uso de videojuegos en su clase son, en primer lugar, la motivación que provoca en los alumnos, seguido de la agilidad en el aprendizaje y la mejora de la concentración. Y el tipo de videojuego utilizado es de carácter educativo, infantil, de música, ajedrez, cartas y estrategia; en menor medida se refleja el uso de juegos de aventuras, plataforma y simulación, como ayuda en las asignaturas de Conocimiento de Medio, Matemáticas, Lengua extranjera y Lengua española. Así mismo, en su opinión, los videojuegos favorecen el desarrollo de habilidades cognitivas: la mejora de la concentración, la resolución de problemas, el desarrollo de habilidades estratégicas, la memoria, la capacidad analítica y el pensamiento lógico y sistemático; tanto como las capacidades psicomotoras: destreza visual, discriminación perceptiva y coordinación espacial; o capacidades personales, entre las que destacan la autoestima, creatividad y autocontrol. Considerando especialmente útil su uso como medida terapéutica para favorecer el desarrollo psíquico y físico de niños con discapacidad.
El estudio revela que sólo dos de cada diez profesores todavía encuentran objeciones a la introducción de videojuegos como herramienta de apoyo didáctico y esto se debe principalmente a la falta de información, de planificación y ausencia de apoyo del centro.
¿Qué piensan los padres del uso de videojuegos para educar a sus hijos? De entre los consultados, el 92% de los padres y madres de niños de entre 5 y 12 años aprueba el uso de videojuegos en las aulas y los considera una herramienta eficaz, considerando que pueden favorecer habilidades cognitivas, personales, sociales y morales, con una afinidad por el uso del videojuego incluso superior al de los profesores. Sorprendente.
Los padres encuestados también señalan que en su mayoría están de acuerdo con el tiempo semanal dedicado por sus hijos al uso de videojuegos, cuya media es de 2 horas semanales en periodo lectivo y 4 en periodo vacacional. Siendo el videojuego la tercera afición de los niños españoles, por detrás de ver la tele y practicar deporte.
Se han consultado a un grupo de expertos formado por investigadores, profesores y diversos perfiles relacionados con el mundo del videojuego, sobre cuales serían las claves para potenciar el uso de videojuegos en el sistema educativo español. Sus respuestas coinciden en que debe integrarse el uso de videojuegos en los planes de formación del profesorado, integrando recursos como guías de explotación didáctica en el aula de estos, o involucrar asesores educativos y expertos por materias durante el desarrollo de videojuegos con potencial de ser utilizados en las aulas.
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