Los tanques en continua evolución

El mundo del Free to play parece engañar. Quizá nosotros, desconfiados, oímos la palabra Gratis y pensamos “Esto tiene taras, seguro”. Pero tras probar títulos como World of Tanks y compartirlos con conocidos, aún seguimos buscándolas. Ya dejamos ver en las impresiones que, a finales de verano, realizamos sobre lo que habíamos experimentado a los mandos de aquellos tanques y las posibilidades estratégicas que se nos ofrecían. Tipos de munición, mejoras en cada vehículo pesado y su variedad de estilos de tanque para adaptar las condiciones a la estrategia que queramos adoptar.

 

Lo que realmente deja a los jugadores boquiabiertos es el lanzamiento de actualizaciones que cambian por completo lo conocido hasta ese momento. Wargaming nos muestra versión 8.1, en la que toda una ristra de vehículos aparecen con sus propias armas, diseños… Entran en juego los ingleses abriéndonos la mente a nuevas contiendas, nuevos estilos de combate y dejándonos diseñar nuevas tácticas.

 

 

Pocos tiempo después, nos anuncian la actualización 8.2 donde entran en acción los tanques chinos. Hasta 17 modelos nuevos, con sus propios diseños y armamento. Además aprovechan para mejorar los vehículos que ya teníamos para equilibrar un poco la balanza. Históricamente, los tanques chinos eran una mezcla de todas las capacidades del resto de los que podemos probar en World of Tanks, su rapidez, su potencia y su precisión.

 

Hay dos puntos que sorprenden sobremanera en las creaciones de Wargaming. La primera de ellas es que, dedicándose a ofrecer productos gratuitos, demuestran un interés especial en mejorar sus juegos y mantener al jugador siempre probando cosas nuevas. Por otro lado, su faceta investigadora para implementar en su título una imagen fidedigna de los modelos de tanque de aquella época, no solo de los que participaron en conflictos bélicos si no de los que quedaron en el tintero, sin llegar a sentir el impacto de un disparo.

 

 

Es lo curioso del título, esa especial dedicación a mantener al jugador interesado con cambios en la experiencia y la aparición de nuevos retos de adaptación y elaboración de estrategias. Un trabajo en equipo donde el fallo de uno puede significar el final de la ronda.

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