1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. X360

Los personajes y la historia de un JRPG no pueden fallar

Aunque todo lo demás sea perfecto
Por Álex Pareja

Octopath Traveler es un JRPG magnífico en muchos aspectos. Enamora a la vista y al oído, hace regresar mecánicas de la mejor época del género, el sistema de combate es magistral y las dinámicas de progreso y mejora no podrían ser mejores. Sin embargo, he sido incapaz de terminarlo tras unas pocas horas junto a él y no creo que lo llegue a finalizar jamás. ¿Cuál es la razón? Que los personajes y la historia no consiguen enganchar ni enamorar, algo que considero clave en este género por encima del resto. 

 

Aunque a veces entendamos (y debamos entender) a los videojuegos como simples productos de entretenimiento sin más, no basta con que estos cuiden sus mecánicas y sus partes más interactivas. Es más allá donde sus creadores deben saber dar en el clavo y conseguir enamorar a los jugadores, por encima incluso de los aspectos más técnicos y mecánicos. Ahora mismo firmaría por una versión de Octopath Traveler con un peor sistema de combate si a cambio me entregara una historia mucho más trabajada y un desarrollo de los personajes que no sea tan simple, previsibile y repetitivo. Seguramente eso me daría motivos de sobra para finalizarlo. 

 

 

El JRPG es uno de los géneros que menos ha evolucionado en la historia, lo hablábamos en el último MGPodcast de la temporada. Eso conlleva que además de tratar de innovar en elementos muy concretos, la esencia debe establecerse en características mucho menos palpables que las mecánicas y dinámicas jugables. Es por ello por lo que obras como Final Fantasy VII, a pesar de haber aparecido en el mercado hace décadas y de haber quedado muy obsoletas en muchos aspectos, continúan siendo videojuegos que se pueden y se deben disfrutar: porque su historia y personajes consiguen calar hondo. 

 

Si el género es tan cuadriculado y ha dado lugar a tan pocos cambios a lo largo de los años es porque sus jugadores han establecido vínculos con ciertos videojuegos. Cuando pienso en obras JRPG que me han marcado recuerdo a sus personajes, a sus enemigos, a su música, a las relaciones entre algunos protagonistas, su desenlace, giros... no recuerdo tanto su sistema de combate o de magia y en algunos casos ni me acuerdo de cómo funcionan ciertas mecánicas de juego que tengo que volver a aprender cada vez que regreso. Por eso es tan importante en este género que la historia y los personajes estén a la altura. Casi es un requisito imprescindible.

 

Final Fantasy VII PSX

 

El videojuego ofrece un abanico tan amplio de opciones gracias a los géneros y a los tipos de público que podemos ir estableciendo pilares básicos que algunos de ellos deben estar siempre presentes. En el tema de los JRPG, después de haber disfrutado de Octopath Traveler pero habiéndolo dejado abandonado a su suerte sin ningún tipo de remordimiento, lo he tenido claro: quiero que estos juegos ofrezcan algo más que un mundo de fantasía básico y unos personajes basados en clichés que de vez en cuando dialogan o detienen la acción para contar su previsible historia; necesito que consigan llenarme de una forma especial que en otros géneros no encuentro tan indispensable. ¿Os pasa lo mismo a vosotros?


<< Anterior Siguiente >>