Los móviles no siempre son una plataforma más

Hay una extraña moda hoy en día y no es, precisamente, Pokémon Go, si bien está relacionada con este juego en mayor o menor medida. Igual que está la moda de jugar a la obra desarrollada por Niantic, está la moda de odiarla. Y, mayor que ésta es la moda de criticar los juegos para móviles. Más que criticarlos, en realidad, la costumbre es todavía más primitiva, basándose únicamente en meter todos y cada uno de los títulos que salen para los dispositivos móviles en el mismo puñetero saco. Y, mira, no.

 

Nada me gustaría más que arrearle con la chancla en la boca a todos aquellos que defienden a capa y espada la frasecita de “los juegos para móviles son una mierda”. Vaya manera más odiosa de generalizar, ¿verdad? Eso no es nada, porque, en fin, haters hay por todas partes. Pero lo de agrupar de esa manera los juegos, sean del género que sean, duele bastante. Eso sí, y aquí, en parte, debo darle la razón a quien sea que hatee a los móviles, y es que hay juegos de móviles muy chuflas. Y, otra cosa que suele pasar, hay juegos que no deberían estar en móviles.

 

Con la llegada de Pokémon Go, me doy cuenta de que es muy cierto: Hay juegos que están muy bien pensados para estar en nuestro Smartphone, y Niantic lo sabe muy bien. Combinar el GPS con realidad aumentada es una pasada si lo haces a lo grande. En cambio, hay otros muchos juegos a los que no les sacamos el máximo rendimiento en una mini plataforma como ésta. Pensaba lo mismo cuando jugaba a PSP: Tengo juegos que disfrutaría mucho más en una consola más potente o más grande. No sé vosotros, pero a mí me gustan grandes. Vale, suficiente. Me explico:

 

Pondré como ejemplo claro el caso de Square Enix (aunque Mou quería pegarme, porque Square Enix es suyo y nadie puede hablar de la compañía sin su permiso), que ha estado últimamente muy metido en este extraño universo de los teléfonos móviles. Square nos ha traído hace poquito las sutiles remasterizaciones de varios Final Fantasy, que se han acabado ubicando en Steam y en nuestros dispositivos Android e iOS. Personalmente, creo que no todos los juegos se disfrutan de la misma forma una vez llegan a nuestras minipantallas.

 

Lo que no me gusta nada nada es que juegos como los nuevos Final Fantasy se queden en móviles. Quizás no tengan los gráficos de Final Fantasy XV, pero sí tienen cierto encanto que podría aprovecharse en otras plataformas. Véase, por ejemplo, PS VitJAJAJAJA. Bueno, más o menos captáis la idea.

 

Otro ejemplo es el del recién anunciado ArcheAge, un MMORPG para PC que llega tres años más tarde a móviles. Desarrollado por el estudio de XL Games, ArgeAge Begins será una interpretación en miniatura de este título coreano. La verdad es que es un juego muy interesante, gracias, sobre todo, a su sistema de clases. El título original ha tenido siempre muy buena recepción, e imagino que eso es lo que ha impulsado a sus creadores a reproducirlo en pequeña escala para móviles. No obstante, creo que cuando se coge un MMORPG y se hace con él un juego para dispositivos móviles, nos lo cargamos un poquito. Sólo un poquito.

 

Me parece que nuestro teléfono está bien para juegos “exclusivos”, como Pokémon Go o, incluso, father.io, que tiene una pintaza increíble; si alejamos esta plataforma de juegos de realidad aumentada o pequeños juegos como Cut the Rope, Angry Birds o Candy Crush, la cosa cambia. Un teléfono no deja de ser un teléfono. Un MMORPG no se disfruta igual aquí. Pongamos cada cosa en su lugar, ¿no os parece?

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