1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. PS4

Las aventuras en tercera persona han sido las grandes triunfadoras de esta generación

Toma nota, Microsoft
Por Rafa del Río

Un mundo abierto con detalles espectaculares, una historia con algún cadáver en la ecuación, combate, coleccionables, crafteo, progresión y su poquito de parkour. Esta es la fórmula mágica para asegurar el éxito esta generación. Algo que Sony ha sabido entender desde el principio viviendo de los réditos de sus tres generaciones anteriores y que Microsoft y Nintendo parecen estar aprendiendo a marchas forzadas para no quedarse atrás. 

 

hzd a

 

Repaso a los últimos años

Puede parecer exagerado, pero si damos un repaso a los últimos años a partir de 2013, el planteamiento no falla. Batman Arkhan Origins, Splinter Cell Blacklist, Dead Space 3 y Assassin's Creed en su línea lo intentaron. GTA V, The Last of Us y el reboot de Tomb Raider fueron más allá. Incluso Metal Gear se rindió al formato con Metal Gear Rising: Revengeance, un trabajito muy fino de Platinum a la altura de otro gran ejemplo, el dmc de Ninja Theory para Capcom con su revisión de la saga Devil May Cry, si bien hablamos de generaciones diferentes.

 

Ya con PS4 y Xbox One sobre la mesa, la cosa quedó más clara. Ni todo el buen talante y creatividad de los divertidos Sunset Overdrive, ReCore, Halo MCC y Quantum Break pudieron nada contra el formato millonario. Atrás quedaron de inFamous Second Son en 2014, Bloodborne en 2015, Uncharted 4 en 2016, Horizon Zero Dawn en 2017 y, por supuesto, God of War y Death Stranding. Las third parties lo pillaron enseguida. Las que no tenían ya juegos por el estilo los desarrollaron, y las que sí, aprovecharon el tirón: Nier: Automata, AC Origins, Batman Arkhan Knight, los nuevos Tomb Raider, Dark Souls II y III, Sekiro, The Witcher 3... La receta del éxito se ha repetido esta generación como por ensalmo, y aunque algunos no consiguieran apurarla al máximo, léase Watch Dogs o Days Gone, las ventas las han acompañado igualmente. Unos números que demuestran que hay vida más allá de FIFA y Call of Duty. Una vida de aventuras en tercera persona con progresión, alguna muerte en el camino y un poquito de parkour. Y si no que se lo digan a Link y su renovado concepto en The Legend of Zelda Breath of the Wild o a Cal en Star Wars: Jedi Fallen Order.

 

stawars g

 

Miedo al estancamiento

En el camino esta generación ha tenido cosas maravillosas que no han sido bendecidas en ventas por no saber atenerse a la fórmula. Podemos hablar de Judgment, Persona 5, Gears 5, State of Decay 2 o Hellblade: Senua's Sacrifice y A Plague Tale Innocence o Dragon Quest Builders 2. Juegos de alta calidad que se salen de la norma de lo que parece que tiene que ser un videojuego a día de hoy y que no logran el éxito merecido a pesar de sus buenos resultados. ¿Exagero? Pero si hasta hay un change.org pidiendo a CD projekt que saquen Cyberpunk 2077 con modo en tercera persona... 

 

El otro día lo hablaba con Mou, Álex y Julián en nuestro podcast: tengo miedo al estancamiento. Es un miedo que ha despertado con lo nuevo que estoy viendo de Ghost of Tsushima, y que aumenta al pensar que, al final, esa poética propuesta de samurais y conquistadores va a tener que pasar el filtro de Sony. El mismo filtro que pasaron Days Gone y Horizon Zero Dawn, y que va a terminar llenando Tsushima de atalayas, misiones de relleno, recadeo y marcadores en el mapa. 

 

Ojo, no me quejo del formato ni pongo pegas a títulos que me están regalando horas de diversión. Es más, animo a Microsoft a fijarse en esta fórmula para lanzar algunos títulos que le aseguren el éxito. Sin embargo, eso no basta para que tema por la saturación del formato en la próxima generación y pida a los dioses del videojuego que no dejen de lanzar títulos diferentes. El dinero es atractivo y llama la atención, pero necesitamos otras obras, títulos que se atrevan a jugarse el tipo por un catálogo más completo y satisfactorio. 

 

¡Nos leemos! 


<< Anterior Siguiente >>