La clave para un rediseño acertado
Desde luego, no es cosa de la influencia y el éxito de Skyrim o Juego de Tronos, pero desde luego en los últimos años lo medieval ha dado un subidón de popularidad que no se puede obviar, aunque no haya llegado a las cotas del fenómeno zombi. Y no es que haya sido por Skyrim o Juego de Tronos, insistimos, pero últimamente hemos estado viendo que los porcentajes de pelo y piel en las armaduras de los protagonistas de videojuegos han aumentado considerablemente hasta el punto de ser puramente estético.
De hecho, en el mismo Dovahkiin es todo estético. No parece que el frío sea un factor determinante en Skyrim cuando la mayoría de personajes andan por ahí en manga corta. No es el caso del nuevo protagonista de Dark Souls II, del que por el momento no conocemos nada, y desde luego sabemos que podremos hacerle todos los cambios de armadura necesarios, pero no deja de ser curioso que nos lo presenten también con un manto de pelo a los hombros. Sigue siendo ambientación medieval, así que le damos el visto bueno como complemento útil.
Donde no tiene mucho sentido es en Dead Space 3, por mucho frío que haga en el planeta que visitará Isaac Clarke esta vez. No tiene sentido porque lleva un traje espacial que supuestamente lo mantiene completamente aislado de cualquier factor ambiental exterior. Si en anteriores entregas no se quejó por el frío en el espacio, no vemos por qué aquí iba a hacerlo, por muy baja que sea la temperatura en este nuevo planeta. Claro ejemplo de mal rediseño, cuando veníamos de un tosco traje de minero espacial en la primera entrega y el gran (y acertado) cambio a esa especie de ciber-ninja espacial más estilizado de Dead Space 2, ponerse ahora la versión espacial del atuendo de Leon S. Kennedy en RE4, nos parece un paso atrás.
Como os decíamos, no es que esto lo haya inventado Skyrim. Hemos visto diseños con este toque anteriormente de una forma muy acertada, como lo fue en la armadura del campeón de Dragon Age II que vestía Hawke en el tráiler, y que sólo podíamos conseguir de esta forma si íbamos por el camino del mago. Aunque muy recargado, entre pelo y pinchos, seguía siendo un gran diseño del que muchos deberían aprender.
Y con "muchos" nos referimos en este caso a alguien en concreto. Tetsuya Nomura ha vuelto a rediseñar a Lightning para el Lightning Returns que hará las veces de Final Fantasy XIII-3, y bien podría haberse fijado en las tendencias en vez de ir a su bola, como siempre. Como bien decía nuestro amigo Pablo González Taboada de KHManiacs y MeriStation, menos mal que no le ha dado por las cremalleras, después de más de diez años abusando de ellas.
Parece que lleva una coraza de N7 por los reflejos, pero no. Eso lo dejaremos para el DLC. En este caso le da por una simetría poco sobria que se descompensa por el exceso de pinchos del escudo, que dicho sea de paso, tiene pinta de ser lo menos práctico para el combate de la historia. Seguro que con unas hombreras de pelo habría tenido un toque épico del que nadie podría haberse quejado.
<< Anterior Siguiente >>