La Zona Oscura de The Division: Amor y Odio a partes iguales
Ayer os hacía un avance de The Division con todo lo que hemos podido disfrutar este fin de semana con la beta abierta del MMORPG Open World Share Shooter de Ubisoft. Apenas un repaso somero de un juego que parece decidido a originar un nuevo género gracias a mezclar muchos elementos en un producto que, al menos por ahora, promete.
Sin embargo, avances a un lado, hubo mucho de la Zona Oscura que me quedé con ganas de decir por falta de espacio: Su funcionamiento, las mecánicas, la mala leche de algunos jugadores y, sobre todo, la inteligencia artifical de los enemigos.
Bienvenidos a la Zona Oscura
El planteamiento de la Zona Oscura es magistral, y está muy bien implementado en el juego y el escenario como una forma de obtener equipo y mejoras al margen de la historia y el argumento del juego general: Un área infestada en la que no hay control de ningún tipo; en la que encontraremos enemigos más peligroso y mejor armados, jugadores que lo mismo deciden ayudarnos que darnos un tiro por la espalda para quedarse nuestro equipo y una ambientación más terrible y oscura que la que vemos en el resto de la ciudad.
Nada más empezar, el mapa nos va marcando ciertos elementos según nos acercamos. Entre ellos están los puntos de estracción -donde tendremos que dejar el equipo que obtengamos en la Zona Oscura si queremos usarlo luego en el área de juego-, las zonas contaminadas -donde suele haber cofres con equipo más que jugoso si tenemos el rango necersario para acceder a su contenido- y zonas de interés, que pueden incluir suministros difíciles de encontrar, equipo y, por supuesto, enemigos.
No te fíes de nadie
La gracia de esta zona recae, como pudimos ver en los vídeos de hace ya un año, en que no hay reglas ni limitaciones. Podemos disparar a nuestros compañeros de The Division -lo que automáticamente nos convierte en Renegados- y quedarnos con su equipo para luego llevarlo a un punto de extracción, o podemos dedicarnos a cazar renegados y ayudar al resto.
El punto de tensión de no saber en qué momento podemos ser atacados por otros jugadores regala unas dosis de deliciosa paranoia al juego, mucho más cuando tenemos en cuenta que el equipo que conseguimos en la Zona Oscura sí que marca la diferencia y que ser eliminados y saqueados supone un descenso de los puntos de experiencia que tanto cuesta obtener y la desaparición del mencionado equipo y parte del dinero que obtengamos en la zona oscura, que es diferente al del resto del juego y con el que podemos comprar mejores armas y mejoras en las tiendas de la zona.
El resultado final es una experiencia de juego en la que nos movemos de forma furtiva si vamos en solitario o con los dedos cruzados si vamos en patrulla, ya que un sólo miembro que dispare a un agent de The Division hace que todo el grupo se convierta en renegado. ¿El problema? Si eres abatiudo en modo renegado pierdes aún más dinero y puntos de experiencia, con el riesgo de descender un nivel.
Mención especial merecen en este sentido los puntos de extracción, especialmente cuando hay más de cuatro jugadores -sólo pueden extraer equipo cuatro miembros como máximo- y ves que alguien está desplegando una torreta, apuntando desde otra azotea o colocando una bomba temporal. Algo muy parecido a lo que sucede en las salidas de la Zona Oscura, donde los renegados tienden a plantar emboscadas a los agentes que vuelven con poco equipo y sin botiquines a reabastecerse, con los bolsillos bien cargados de dinero.
Los enemigos tampoco ayudan
La gracia de la Zona Oscura recae sobre todo en el posible PvP y la sensación de paranoia, pero a su vez incluye a unos enemigos PNJs con una de las mejores IA que he visto en un juego de estas características hasta la fecha. ¿Cansado de la sencillez de los combates en la zona normal y que los enemigos jueguen a ser patos en una galería de tiro? Vente al lado oscuro, que tenemos galletitas. O mejor dicho, unos enemigos con una IA endiabladamente bien llevada.
Los enemigos de la Zona Oscura son puñeteros. En primer lugar están mejor equipados que tú, lo que ya de por sí es de agradecer si os gustan los retos. Sus armas hacen más daño, su blindaje aguanta más impactos, si les tiras una granada cambian de cobertura y si desapareces comenzarán a tirar granadas para hacerte salir.
Por si esto fuera poco, usan también sus habilidades para localizarte, y su comportamiento no es errático: Si logras herir a uno de ellos, huirá antes de que lo mates, siendo cubierto por sus amigos que usarán fuego de supresión o, directamente, irán a por ti. Intentarán flanquearte cuando estés quieto en una cobertura, y para culminar la gracia, tienen una puntería cojonuda. ¿Te crees muy chulo con tu rifle francotirador? Espera a que te disparen en la cabeza y te maten con un solo disparo para entender por qué los francotiradores no le caen bien a nadie.
Vente al lado oscuro
La Zona Oscura es una de las cosas más intensas que he disfrutado en un juego desde la llegada de la nueva generación, y como digo, está muy bien implementada en el juego al tratarse de una zona local restringida a la que podemos acceder al llegar a un rango determinado, sin romper la estructura narrativa original del juego ni invitarnos a activar determinados menús para acceder a ella. Es complicada, es dura, en ocasiones frustra y demuestra lo mejor y lo peor del ser humano como jugador.
Así que preparaos para una experiencia diferente a la que estéis acostumbrados, formad una patrulla de amigos de confianza, y engrasad bien vuestras armas: Esto promete. Esperemos que la cosa continúe como hemos visto y no haya cambios de última hora que arruinen la experiencia.
¡Nos leemos!
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