La pelea de Sony con el multijugador cross-network

¿Qué puñetas es el "multijugador cross-network"?, os preguntaréis alguno. Es un término más o menos recién acuñado que simplemente implica la conectividad de plataformas enemigs en su multijugador para que las comunidades de ciertos videojuegos sean en realidad una sola gran comunidad que tenga todos los jugadores posibles a su disposición para jugar, organizarse y demás. Es algo que en cierta medida ha recuperado importancia por Microsoft.

 

Hace no mucho, la compañía sugirió que Sony y Microsoft permitieran la conectividad entre PlayStation Network y Xbox Live Gold para juegas como Rocket League, que es un exitazo sin precedentes y que es ajeno a ambas empresas. Sony dijo que nanai, que eso no sabían siquiera si era posible con su plataforma. Los motivos que no dieron también son evidentes: ¿por qué iban a renunciar a una posición de ventaja sobre Xbox One con tal de quedar bien con los usuarios? Podría haber dicho "Se juega más en PS4, así que Microsoft puede joderse", por hablar en plata.

 

 

Esto es algo fantástico porque Microsoft ha lanzado la patata caliente a Sony, ha quedado muy bien con los jugadores al proponer esto y al sumar al PC para ciertos juegos. Rocket League es el primer juego que se propuso para esta nueva conectividad, pero otros estudios también están interesados en el asunto, como CD Projekt. Los polacos quieren que algo así se consiga pronto para que su nuevo juego, Gwent, pueda contar con el mayor número de jugadores. 

 

Así pues, una vez más, la cuestión es la habitual: apostar por lo mejor pra los jugadores o apostar para lo mejor para la empresa, que no siempre van ligados. La postura de Sony es comprensible por lo que decíamos más arriba: ellos han conseguido una ventaja sobre su competencia, no tienen por qué renunciar a ella, incluso si eso les deja como los malos en todo este asunto. Lo que comentaba, Microsoft ha jugado una buena mano con esto del cross-network.

 

 

¿En qué puede quedar esto? Puede quedar en nada, si Sony no avanza y Microsoft sí lo hace. La conectividad entre Xbox One y PC está creciendo, de modo que poder jugar a juegos que no son FPS entre ambas plataformas seguro que es un punto positivo para la empresa, aunque no sé hasta qué punto es un punto de venta para la consola en sí. También puede que Sony devuelva el favor a Microsoft y haga como hizo con Street Figther V: cross-network solo con PC y Steam. 

 

Y casi podría salir ganando. Nadie quiere usar la plataforma de juegos de Microsoft en PC porque Steam es lo más popular y Windows 10 es un espía en tu ordenador, además de que la Store de Windows es un chiste de mal gusto. 

 

Aún con esto, pese a que ambas tienen sus motivos más allá de los fans, sería bonito beneficiarse de esto y que se convirtiera en un estándar. Por un lado, las compañías potenciarían su producción de juegos exclusivos, que son los que hacen avanzar las plataformas siempre; y, por otro, podríamos jugar a Destiny, Call of Duty, Battlefield y demás juegos sin pensar en qué amigo tiene qué consola. En España, vale, casi todos tenemos una PS4, pero fuera de nuestro país, esto es un problema muy común.

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