La nueva generación y un catálogo a estudiar
Ya llevamos casi un mes con nuestras consolas nuevas y podríamos decir que ese momento tenso del lanzamiento ya está pasado. De hecho podemos pensar qué sensación nos ha quedado tras tanta pelea. Quizá uno de los aspectos más importantes, cuando uno decide cuál comprar, sea el catálogo que le espera por delante. En este caso está claro que una de ellas ha empezado con mejor pie que la otra.
Aquellos que hayáis comprado Xbox One -y os hayáis dejado los 500€- podréis estar disfrutando de un Forza 5, un Killer Instinct o un Dead Rising 3. Hay muchos más juegos de lanzamiento, pero de momento centrémonos en los exclusivos. En cuanto a juegos de carreras, no hay competidor, Sony ha dejado su Gran Turismo 6 en PlayStation 3. Por otro lado, DriveClub se ha visto retrasado y eso no ha ayudado a la compañía en el lanzamiento de la máquina. Y es que PlayStation 4 se ha encontrado con algún que otro bache más para su oferta inicial. Infamous: Second Son es otro claro ejemplo de estos comienzos accidentados. De momento tenemos un Knack que cuesta tomar como un título de nueva generación y un Killzone Shadow Fall al que quizá le cueste mostrarse como carta de presentación llamativa.
Así que nos encontramos una PlayStation 4 que, durante la campaña de promoción, parecía que fuera a sorprendernos, a desbancar a su competidora. Pero, dejando a un lado las ventas, no está tan claro el éxito de cara al jugador. Microsoft ha podido no acertar con algunas cosas como el precio, el catálogo de aplicaciones, pero nos ha dado algunos títulos a los que nos apetece jugar. Y no es que no vayamos a recibir otros tantos por parte de Sony que demuestren lo buena consola que es PS4. Simplemente no está disfrutando de un lanzamiento destacable. Por supuesto que los atrasados llegarán, al igual que lo harán The Order, el recién anunciado Uncharted y otros tantos. Pero lo mismo ocurrirá con One, y está claro que quien acudió el día 22 de noviembre a la tienda ya tiene tiempo ganado.
No os llevéis a engaño. Esto no es para partir una lanza a favor de Xbox One ni una condena a PlayStation 4. Son dos consolas que acaban de nacer y, con mejor o peor aterrizaje, ya están aquí para acompañarnos una larga temporada. Y, aunque no sea justo apoyarnos en ello, con las third parties ha ocurrido algo bastante interesante. Muchos de sus juegos, compartidos entre ambas plataformas, se mueven mejor en la consola de Sony que en la de Microsoft. Tal es el caso de Battlefield 4, Call of Duty Ghosts o Assassin´s Creed -este último no tan destacable. ¿Nos dice esto que PlayStation 4 es mejor que Xbox One? Simplemente hace que resulte más llamativa para según qué jugadores y levante el ánimo ante una oferta tan floja. Hay muchos juegos anunciados ya para las dos máquinas, pero pocos se encuentran tan cerca o son merecedores por su exclusividad de justificar un desembolso como el que se nos pide. Parece que las dos compañías se han quedado, en uno u otro aspecto, a medio camino de lo que parecían ofrecer. Tras las Navidades será un momento bastante decisivo para decantarse por una u otra.
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