En un momento en que la industria del videojuego parece saturada de juegos de acción en primera o tercera persona, genéricos y sin innovación alguna con respecto a los que fundaron los pilares del género, llega un director de arte para decirnos que lo que hace falta es más realismo, y no lo dice un cualquiera.
Viktor Antonov, de cuya cabeza salió el concepto de la estremecedora Ciudad 17 de Half-Life 2 y quien se está encargando de poner toda la ambientación a Dishonored, declaraba en una conferencia en Brighton que la homogeneidad de estilos artísticos está matando a los videojuegos.
Hablando de localizaciones futuristas icónicas como las que podemos ver en Metropolis o Blade Runner, Antonov declaraba:
Y sí que es cierto que estamos ya hartos de ver localizaciones clónicas, ruinas futuristas, y si nos ponemos, hasta situaciones que nos hacen vivir en un déjà vu constante, e incluso en los juegos en los que nos permiten explorar un mundo abierto, muchas veces nos encontramos deambulando por un plano en lugar de guiarnos por localizaciones icónicas, porque en la mayoría de los casos, no las hay, salvo en licencias como Assassin's Creed, que aprovechan reconstrucciones de ciudades reales.
Son pocos los juegos que nos metan de lleno en una ciudad que queramos explorar de arriba a abajo, y Dishonored podría llegar a ser uno de ellos.