1. Mundogamers
  2. Noticias

La importancia de jugar en la plataforma original

O por qué yo no recordaba así Donkey Kong Country
Por Bruno Louviers

Os voy a contra la historia por la que este post existe: hace poco, me compré en la eShop de Wii U los Donkey Kong Country para revisitarlos. Estoy jugando al primero y me paso un par de pantallas cada noche, antes de acostarme – bendito mando con pantalla, a veces es muy útil – y me he dado cuenta de una cosa: qué pocos puntos de guardado hay en este juego. He tenido que usar las opciones de guardar estado de Wii U para no perder una hora de sueño.

 

Esta tontería me ha hecho pensar en lo importante que es jugar a los videojuegos en su plataforma original. Yo ya no tengo ninguno de los Donkey Kong Country en SNES – es lo que tiene haberla compartido de niño con mis hermanos, las cosas se terminan perdiendo – y me resultaría imposible jugarlo con su mando original, con sus virtudes y defectos; y, sobre todo, con su ritmo original, esto es, teniendo que acabar casi un mundo entero para poder guardar partida en la caseta de Candy Kong. 

 

Jugarlo en las condiciones en las que lo estoy haciendo no me está haciendo disfrutar menos del juego, vaya. Sigue siendo un plataformas magnífico y difícil, con unos gráficos que han envejecido pero que siguen teniendo encanto – las animaciones de los monos siguen siendo 'state of the art' – y con unos niveles que ya quisiéramos tener hoy en día en los plataformas, incluidos los de Nintendo. Donkey Kong Country Returns es genial, pero los originales siguen siendo mejores, por decirlo claro.

 

Esta experiencia no es que me haya abierto los ojos, pues sigue prefiriendo jugar a Wii en el emulador de PC – relajaos, que tengo los juegos originales – por aquello de mejorar los gráficos de Mario Galaxy y jugar en 1080p, aunque sean reescalados. La experiencia 'no es exactamente la misma', pero la prefiero a la original, vaya. Lo mismo ocurre con ciertas remasterizaciones o remakes, aunque por ejemplo prefiera jugar a los Metal Gear Solid originales antes que a su versión HD. Supongo que lo mismo el pasa a los fans de Star Wars con sus tropecientas reediciones y montajes.

 

De ahí que piense que esto es una cosa de los juegos más antiguos, de los que tienen más de 15 años y de los que se jugaban en 4:3, pero también que evalúe lo elitista y complicado que es mantener las sensaciones originalísimas de un juego de SNES: hace falta la consola y el juego, algo que no siempre es posible tener a mano o que ocupa un hueco importante en el salón; y también una tele de tubo, y a ser posible, conectada a la consola para poder apreciar las líneas de escaneado, pues separan mejor los píxeles y todo eso. ¿Complicado, verdad?

 

Me resigno a pensar que los videojuegos son un medio muy efímero que, a diferencia del cine, que se puede ver en 4:3 o 16:9 sin demasiados problemas, y cada vez en pantallas más grandes que permiten apreciar hasta los formatos más extremos como el 2,39:1; terminarán 'estropeándose' para futuras generaciones. Que Archive.org haya rescatado muchos juegos para poder tenerlos online es un grato movimiento, pero jugarlos en emulador ya no tanto. 

 

Y esta 'tristeza' también me viene por otros juegos. ¿Qué pasa con los multijugadores masivos que, dentro de 5 o 10 o 15 años ya no tengan jugadores? Habrán dejado de ser los juegos que eran y será imposible experimentarlos o incluso entenderlos. Jugar a Donkey Kong Country en una pantalla donde los píxeles se suavizan un poco y el refresco en pantalla no funciona igual no es tan trágico como pensar que quizá nuestros hijos nunca consigan entender lo que es World of Warcraft pese a que los llevemos a un museo donde se organice una exposición en la que se recrea una raid.


<< Anterior Siguiente >>