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La forma de dar descripciones en notas de Portal, Gone Home y Dark Souls aún no se ha igualado

Y han pasado unos años ya
Por Adrián Suárez Mouriño

Al tema de descargar toda la narración en las notas, pintadas, escritos, etc, hay que darle una vuelta y repensarlo, porque seguimos haciendo las cosas igual que hace 13 años. Ya no debería valer lo de Bioshock, ya no sirve eso de encontrar una nota o una grabación con información súper detallada y precisa sin faltas de ortografía y sin ser capaz de responder a la pregunta: ¿quién la ha dejado ahí y por qué? Ya no vale eso.

 

Porque es muy cómodo dejar que los personajes hablen y llenar el juego con información textual extra a modo de ítems para que la encuentre el jugador, e intentar defender así que la narrativa del juego es compleja y muy elaborada. Pero casi siempre es una cagada en realidad. Solo hay tres juegos que usan bien las notas: Gone Home, Portal y Dark Souls; bueno, lo de 'solo' es una exageración, claro. Pero ya me entendéis.

 

El primero, el mejor en mi opinión si hablamos de notas escritas como tales, es genial porque cómo están escritas, sobre qué superficie y dónde se esconden aporta información. También porque es difícil encontrarlas todas al estar guardadas por sus dueños en sus habitaciones. Es que incluso si alguna está pegada a la pared con un esparadrapo, la forma en que ese adhesivo está cortado aporta información.

 

 

Lo que hace genial Portal es entregar notas pintarrajeadas en la pared. Ya sabéis, aquello de que la tarta es una mentira es genial porque solo se muestra una vez, en un momento concreto y cuando la realidad del juego parece romperse. Sin excesos, sin efectismos. Pura contundencia.

 

Y finalmente llegamos a Dark Souls, el niño bonito de esta casa. La gracia de Dark Souls es que aunque sus descripciones sean muy detalladas, siempre queda la duda de cómo el jugador recibe esa información. Yo siempre he creído que el personaje que controlamos interpreta esa información que leemos al estudiar una armadura o un arma; es decir, que él mismo da su opinión en base a lo que él conoce del lugar que recorremos. Sea esta la verdad o no, se consigue con esta sugerencia darle entidad al asunto.

 

Estos son tres ejemplos que ya tienen sus años y que todavía no se han superado. La información que se da esta forma tiene que estar cargada de mucha intención, cuidando más el cómo que el qué. Una pieza de papel, una grabación o una pintada no puede estar puesta ahí por el desarrollador, sino por alguien del mundo de juego, y tiene que ser alguien de verdad. Pocas veces ocurre. Muy pocas.


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