La discutible decisión de cancelar Yooka-Laylee en WiiU

Kickstarter, IndieGoGo y demás plataformas de financiación colectiva tienen sus peligros. No vamos a meter demasiado el dedo en la llaga, seguro que todos conocéis algún caso de equipos que se lo llevaron calentito y no dieron un palo al agua. Junto a ellos, afortunadamente, encontramos juegazos que gracias al mecenazgo y el patrocinio de los aficionado vieron la luz, como Pillars of Ethernity, Elite Dangeorous, Dreamfall: The Longest Journey Chapters, que dentro de poco saldrá en consolas o Divinity: Original Sin. Afortunadamente no todos son retrasos injustificados como los de Inafune con Mighty No. 9 o gastarse el dinero en zumos exóticos y señoritas guapas como el caso de Ant Simulator. 

 

Fraudes y estafas a un lado, se da por hecho que cuando un equipo es profesional y consigue, no sólo la financiación necesaria, sino una muy por encima de las expectativas del estudio, el juego es cosa hecha. Podrá tardar más o menos, ahí tenemos a Koji Igarashi, que a este paso va a tardar más en hacer un juego en 2D que Yu Suzuki con Shenmue III; pero lo importante es que, habiendo profesionalidad y dinero, el juego, y sus promesas, deberían ver la luz. ¿No?

 

 

Pues al parecer no 

O así lo han decidido los trabajadores de la empresa Playtonic, antiguos miembros de la vieja guardia de Rare de los tiempos de los hermanos Stamper, que tras prometer que su prometedor Yooka-Laylee tendría una versión en WiiU y aprovechar el anuncio para lograr una financiación casi indecente en Kickstarter, ahora se desdicen y anulan dicha versión por 'problemas técnicos imprevistos', aunque eso sí, habrá una versión de la nueva y flamante Nintendo Switch. 

 

No hay que ser un lince para comprender el auténtico problema que se oculta tras el trabajo de hacer una versión para WiiU, una máquina que, para cuando Yooka-Laylee vea la luz finalmente el 17 de abril de 2017, habrá sido sustituida en muchos hogares por la nueva Nintendo Switch: de cara a futuras ventas es mucho más rentable para el estudio, que ya se ha embolsado un buen puñado de ventas con la financiación de quienes querían una copia de la sobremesa de Nintendo y no van a contar con ella. 

 

 

Honestidad e integridad

La medida de cancelar la versión en WiiU después de haberla vendido y cobrado a miles de patrocinadores está fea, pero llega a niveles de ridículo capitalista cuando pensamos en cómo funcionó el kickstarter de Yooka-Laylee, un proyecto que alcanzó su financiación inicial -175.000 libras- en apenas 30 minutos y que en su primer día ya había superado su meta más alta con un millón de libras esterlinas, casi 1.200.000 euros. Y la cosa no se quedó ahí, pues Yooka-Laylee ha terminado convirtiéndose en el juego británico mejor financiado con un total de 2.090.104 libras, lo que al cambio vienen a ser dos millones y medio de euros. 

 

Que un estudio que ha multiplicado por 12 la financiación esperada y por dos su meta más salvaje se permita decir que están teniendo problemas técnicos imprevistos al convertir su juego a una plataforma que lleva años en el mercado pero no tenga problemas en convertirlo a una nueva consola es de broma. Que además esto signifique dejar en la estacada a miles de personas que han confiado en ti y en tu proyecto, es de juzgado de guardia, una práctica digna de las grandes distriuidoras y que parece demostrar que a playtonic se les ha subido la libra a la cabeza. 

 

 

Sentando cátedra

Lo peor es que esta forma de hacer las cosas podría sentar cátedra, y si bien es normal dentro de un margen que seamos comprensivos con las fechas de entrega y los retrasos, el hecho de eliminar versiones de juegos por las que ya te han pagado es llevar las cosas a otro nivel, un nivel que ni podemos ni debemos permitir.

 

Hoy es Yooka-Laylee, pero si su decisión sienta cátedra, mañana podrían ser Little Devil Inside, previsto para junio de 2017, o Bloodstained: Ritual of the Night, para mitad de 2018. ¿En serio conviene a estos estudios sacar una versión para WiiU si el que se ha alzado con la mayor financiación ha decidido eliminarla de sus planes? Pinta mal la cosa, otro de los problemas de Kickstarter que, una vez más, deja en posición de indefensión al jugador que ha apoyado con su dinero y su ilusión el trabajo de quienes, al final, en ocasiones, sólo buscan una forma de seguir pasando la gorra tras la actuación. 

 

¡Nos leemos!

<< Anterior Siguiente >>