La desesperación de esperar en los modos multijugador

Los modos multijugador tradicionales sólo funcionan cuando funcionan, y eso sólo es cuando el videojuego que los soporta lo ha vendido todo. De nada sirve añadirle esta funcionalidad a todo título que salga al mercado porque no va a haber nadie en las salas online, o casi nadie, en términos de jugadores idóneos para iniciar una partida. Y no hay nada peor al sumergirte en una experiencia multijugador que esperar.

 

Por eso hacen falta títulos como Call of Duty, siendo fundamental que sean siempre lo mismo, llegando con sus usuarios ya fidelizados, para que cuando uno quiera disfrutar de una experiencia multijugador rápida, divertida y bien construida, pueda. Simplemente metiendo el juego en la consola, activando la opción y jugando en cuestión de segundos.

 

 

Son términos de ventas, no hay más. Si el juego no vende muchísimo y no tiene enamorados a sus jugadores, las salas estarán vacías. En otros títulos resulta ridículo pretender sumergirse en una partida competitiva, ya no solo porque hay poca gente jugando, sino porque las desarrolladoras ni siquiera son conscientes de que esto puede pasar. Esperamos para que el juego se actualice, esperamos para que se descargue una nueva versión del sistema operativo de la máquina, para que el juego cargue... ¿también para echar una maldita pachanga? Títulos como Street Fighter IV, y todos sus hijos, sí son conscientes de este hecho, permitiéndonos disfrutar del modo arcade mientras aguardamos ¿pero y el resto? Seguro que recordaréis como en el Ridge Racer de PSOne, en los tiempos de carga, nos permitía jugar al Galaga ¿no sería fantástico que se incluyeran minijuegos en las esperas pre-partidas?

 

Imaginaos que mientras esperamos se iniciara una pequeña partida a un juego antiguo de la compañía, o a uno especialmente preparado para él, y que en función de los puntos obtenidos se produjeran variaciones en los lances de la contienda online una vez comenzada. No hablo de modificar stats, pero sí que ésta se iniciara pudiendo usar el radar para localizar a los enemigos nada más comenzar, o algo así. Si ya se hicieron intentos para minimizar el impacto de los tiempos de carga, como fabulosamente lo hizo Bayonetta dejándonos prácticar nuestros combos, ¿no es momento de empezar a reflexionar acerca de las esperas antes de cada partida online? ¿o voy a tener que limitarme a jugar a COD cada vez que quiero una experiencia multijugador por miedo a una espera eterna?

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