La consola como medio rápido y fácil de juego es historia
¿Por qué elegís comprar una consola como medio de juego? Quizá muchos argumenten su elección con la clásica excusa de meter el disco y comenzar a jugar. Si somos sinceros y nos paramos a pensar un poco, esto ya no es así. Lo primero que nos encontramos es que es necesario un proceso de instalación del juego. Este no tiene por qué durar mucho, pero es algo que hay que pasar, al menos una vez.
No sólo nos enfrentamos a una primera barra de progreso sino que muchos juegos, al iniciarlos, nos suelen saludar con frecuentes actualizaciones y parches -véase el caso de Battlefield 4. Solución de errores post-lanzamiento o mejoras gráficas, como le ha ocurrido a Assassin´s Creed IV, que retrasan el inicio de nuestra partida. Aún así seguimos apostando por estas máquinas porque siguen siendo más cómodas -según para quién- que comprar y gestionar un PC.
No quiero centrarme en el caso de las correcciones, parches y constantes actualizaciones en los sistemas, sean por seguridad o estabilidad. Es el último caso el que a captado mi atención por parecerme una violación de todo lo que representa una herramienta accesible de ocio. El no nuevo problema con el protocolo NAT vuelve a atormentarnos para las partidas multijugador. Algunos de vosotros pudisteis sufrirlo en la anterior generación, con vuestra PlayStation 3 o Xbox 360. Ayer estuvimos solucionando la apertura de puertos, desactivación del firewall del router y otros trámites de seguridad que han de realizarse ante este problema.
Los síntomas que provoca esta incidencia recaen sobre el modo multijugador. En algunos casos no encontramos siquiera las partidas y en otros no podemos comunicarnos con nuestros amigos. En realidad, con algunos conocimientos de informática y navegando por la red, uno puede encontrar la solución en no más de media hora, pero ¿por qué? Es decir, ¿por qué un chico de 15 años o su padre deben buscar una solución a un problema que ni entienden, ni tienen por qué entender? Se supone que comprarse una consola, con todas las posibilidades que trae en su enfoque al juego online, es una opción fácil y rápida. Pero vamos viendo que empieza a no ser tanto de cada cosa.
¿De quién es culpa, Microsoft, Sony, o es de los ISP? Pues cada uno a su modo es responsable. Los proveedores de servicio de conexión no lo ponen demasiado fácil cuando exigen al usuario tener ciertas habilidades de gestión de su router. Por otro lado, con lo grande que se ha vuelto este mercado, las compañías podrían comunicarse con Movistar, Ono y demás para establecer un plan de contingencia. Según el router que tengáis os será más fácil gestionar esta apertura de puertos. En algunos casos, podría bastar con activar la opción de UPnP, pero en otros tendremos que permitir el acceso a la dirección IP de nuestra máquina por cada puerto. Si todo el interés de las compañías para el futuro de los videojuegos se dirige hacia la nube o el multijugador, deben empezar a buscar soluciones por nosotros. Si quieren que apueste por consola en lugar de PC y volcarme en el contenido online, no debería encontrarme con baches por el camino. Sony se ha centrado más en aportar una opción a la mejora del ancho de banda mediante su asociación con Ono para una línea de 200 Mb. Bajemos el listón y centrémonos en que las consolas comiencen a comunicarse con el exterior sin la más mínima gestión del usuario.
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