Jugar en tablet no está tan mal

Ya hace tiempo que parece que esa guerra entre los juegos en smartphones y las consolas portátiles terminó cuando ambas facciones tomaron caminos bien diferenciados, y por ahora parece que está claro que el juego portátil no tiene intención de desaparecer en vista de que tiene cierta identidad propia. Una identidad propia que a juegos de smartphone y tablet les cuesta encontrar, y es que estos dispositivos sólo táctiles no sirven para todo.

Uno de los grandes problemas de los juegos de smartphone con controles más complejos que 'tocar para saltar' en un auto-runner, se soluciona en una tablet ya que aunque seguimos poniendo los dedos sobre la pantalla, la proporción que se tapa es menor. Es una obviedad, pero es un gran punto a favor para las tablets que relegan a los smartphones a dispositivos para 'jugar en el metro' sin dar mucho lugar a una mayor variedad. Aunque siempre hay excepciones, claro.

Y después de haber sido defensor a ultranza de las consolas portátiles en aquella guerra absurda que no ha llevado a ningún lado, por fin hay que admitir que el juego en tablet ya tiene un atractivo independiente, ya que se diferencia lo suficiente como para resultar mucho más interesante, y está consiguiendo dar cabida a determinados géneros que no requieren la precisión de unos buenos botones. Géneros más pausados que pueden ir más allá de puzles sociales, géneros que realmente pueden atraer a todo tipo de jugadores y que de momento pocas están explotando debidamente.

Géneros como la estrategia de XCOM: Enemy Unknown son un lujo en tablet, un lujo tanto para bien por su calidad, como para mal porque no es precisamente el formato más barato en el que podemos encontrar el juego. Pero si futuras entregas de la saga u otros juegos de estrategia del estilo se hiciesen en exclusiva para tablets tampoco sería una gran molestia. Sería un formato apropiado.

En este aspecto la que más está arriesgando es Square Enix. En breves dejará de ser exclusivo de tablets, pero lanzar todo un spin-off de Deus Ex: Human Revolution como es Deus Ex: The Fall y trasladar todo el apartado jugable a un control táctil que no ha quedado nada mal, ha sido arriesgado, y si bien no se desenvuelve bien con el modo de acción directa, el sigilo pausado, la observación y el buen manejo de menús a través de una interfaz táctil le sientan como un guante, igual que le sienta bien a muchos JRPGs con combates por turnos cuya única pega está en su elevado precio.

Sigue siendo ineficaz del todo para juegos que requieren rapidez y precisión como Street Fighter IV, y no habrá forma de solucionarlo sin un pad físico de por medio, pero este formato ya ha demostrado que las aventuras gráficas se juegan casi mejor que en ningún otro sitio, y que incluso experimentos y rarezas como Surgeon Simulator tienen cabida en el juego en tablets. Ahora sólo falta un buen filtro y grandes ideas para los géneros que encajen para que la App Store y Google Play no sean lugares en los que descartar el 95% de los juegos por ser clones malos.