Juegos que no lo fueron en la actual generación
Acabe o no la generación actual en un tiempo relativamente corto, la realidad es que ha sido un momento de la historia del videojuego realmente nutrido de grandes ideas y mejores títulos. Pensándolo en frío podremos ver los muchísimos juegos interesantes que han ido apareciendo en PlayStation 3, PC y Xbox 360, pero resulta particular que mucho software anunciado a lo largo de los últimos años, al final, han acabado sin salir. No hablamos de proyectos cualquiera: estamos ante obras con licencias importantes y firmas con desarrolladores idem detrás. GameInformer ha hecho una lista de ellos, si queréis consultarla podéis hacer click aquí, pero yo querría quedarme con algunos títulos que prometían mucho y que al final no se pudieron lanzar.
No todo ha sido bonito en la presente generación: hay empresas, y muy míticas, que han salido mal paradas del presente ejercicio, siendo Factor 5 y Bizarre dos de ellas. Según parece, Factor 5 tenía en proyecto de Superman entre manos. El hombre de acero volaría como nunca en un juego desarrollado por gente que de volar sabía un rato... hasta que llegó Lair, claro, y entonces comenzó el follón. Por otra parte, hoy mismo se ha confirmado que tras trabajar en Blur, Bizarre tenía un nuevo juego de coches entre manos que nunca llegó a ver la luz, puesto que la empresa acabó cerrando el chiringuito.
En el mundo de los cómics y las películas tampoco se ha salvado: tenemos el caso del título que estaba desarrollando THQ para Los Vengadores, una especie de epopeya en primera persona con los “héroes más fuertes del mundo” que quedó en nada. Batman, a pesar del éxito incontestable de Rocksteady con su Arkham Asylum y City, ha sufrido dos varapalos serios con Gotham by Gastlight y el juego de The Dark Knight. Pandemic, tenía que adaptar la película, pero acabó siendo cancelado. El caso de Gotham by Gastlight es más extraño y experimental: los desarrolladores de F.E.A.R. pretendían tomar el cómic del mismo nombre y llevar a Wayne a luchar contra Jack el Destripador en el siglo XIX.
También hemos tenido ostias muy sonadas, y creo que una de las mayores las protagonizó Sony en el E3 de 2006. El London Studio presentó por todo lo alto Eight Days, un juego de acción que pretendía romperlo en PlayStation 3. Lo único que acabaron rompiendo fue la propia producción, que nunca llegó a salir y nos quedamos compuestos y sin título. Eso sí, nos dejó una CG trepidante con una mirilla traviesa que aparecía y desaparecía en momentos inoportunos y que nos hacían dudar de la veracidad del proyecto. Sony se pegó otra leche con Ninja Theory y Heavenly Sword 2. Según comentan, se canceló a las pocas semanas de comenzar su desarrollo, por lo que no fue algo realmente grave.
Los japoneses tampoco se salvaron de la quema: Inafune tuvo que cancelar Megaman Universe y Megaman Legends 3, dos juegos muy prometedores y deseados dentro de la franquicia del Blue Bomber. El primero era una continuación directa en Nintendo 3DS de la franquicia poligonal comenzada en PlayStation, mientras que el segundo parecía una suerte de Little Big Planet en el mundo de Megaman. Uno de los momentos más malos de Itagaki y Tecmo fue cuando quedó completamente descartado el proyecto DOA: Code Chronos, el hipotético Virtua Fighter RPG de Dead Or Alive, que acabó quedando en nada.
Es probable que te estés preguntando en qué quedará todo ese contenido que queda perdido en el limbo del videojuego, y no te puedo dar una gran respuesta al respecto: normalmente se pierde en los cajones, papeleras y se intenta reciclar lo que se puede para posteriores estudios y proyectos de las respectivas desarrolladoras. Lo que se puede salvar de esas obras desechadas se acaba sacando de estraperlo de las oficinas y acaba apareciendo a lo largo de los años de una manera u otra. Ha pasado con muchos juegos, y comunidades y páginas como UnSeen64 tratan de recopilarlas en su blog y foros. Hay una gran comunidad detrás de los juegos unreleased, y valdría la pena tratar el tema con más profundidad en un futuro cercano.
Hemos pasado mucho durante toda la generación, cosas buenas y malas, pero creo que ha acabado valiendo la pena y todavía nos quedan unas pocas páginas por apurar. Lástima de todos los que nos han dejado en los últimos años, pero es una circunstancia que a veces se antoja inevitable en la industria.
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