J-Stars Victory VS no traerá personajes en DLC
J. Stars Victory Versus presume de que todos los personajes que formarán la plantilla de luchadores estarán disponible desde el mismo momento del lanzamiento del juego, es decir, sin personajes descargables de ningún tipo. La noticia se ha recibido con alegría en los foros por los que ha rodado. ¿El fracaso de los DLC? ¿Tan quemado ha quedado el usuario que esto es noticia?
El modelo de negocio que se intentó explotar en la generación que ahora se va tuvo mucho de descargable, no en vano, resultaba una opción más que interesante para que el jugador se quedara con el título original, sin venderlo, y para que la vida de éste se alargara en el tiempo. Un excepcional puente para que un autor pudiera seguir enriqueciendo su obra ¿Pero qué ha sucedido? Que tras una generación entera y lonveva no han sido capaces de sacudirse de encima el estigma del oportunismo y de la sensación de que el juego llegaba a medias.
Resulta curioso que una noticia sea que se ha eliminado una opción que fue novedad para los consoleros de esta era, pese a que gracias a ellos se han compuesto exquisitas ediciones GOTY de nuestros juegos preferidos, pese a que hemos tenido grandes descargables como la que nos llevó a enfrentarnos a Artorias of the Abyss o el desquicie de flúor de Far Cry 3 Blood Dragon.
Sin duda, la raíz proviene de un sector muy machacado, con unos compradores fieles castigados por la piratería ejercida por otros no tan fieles, por unas compañías que han descuidado sus lanzamientos, llenándolos de bugs y de consolas a las que sólo les falta explotar, por títulos que salen a setenta euros, castigando al usuario que adquiere el título de lanzamiento con una bajada de precio a treinta euros a las pocas semanas.
El mercado de los videojuegos en consola todavía no ha conseguido estabilizarse, encontrar su norte. Algo totalmente logrado ya por el PC, al menos mucho mejor encaminado. Es una lástima no saber distinguir el grano de la paja, no hay que castigar a todos los juegos solamente por traer DLC ni alegrarse por la promesa de que no nos llegarán en uno u otro juego. Como conclusión, esto nos lleva a una terrible realidad: los jugadores no nos fiamos de aquellos que nos sirven nuestros juegos, y ellos tampoco se fían de nosotros. Y así, construir un mercado en el que todos ganemos, es muy difícil.
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