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Indie Game: The Movie. Una historia de esfuerzo y superación

Entra en la vida de cuatro desarrolladores independientes
Por Raúl Rosso

Por suerte, hace poco pude cumplir uno de mis sueños de la infancia y actualmente me dedico profesionalmente entre otras cosas al desarrollo de videojuegos a nivel creativo. Aún habiendo pasado gran parte de mi vida haciendo mis pinitos en el tema como hobby, la realidad es bastante más dura y desafiante de lo que parece. No se imaginan el grado de profundidad conceptual que se requiere a la hora de plantear un producto para resulte atractivo y la cantidad de factores a nivel psicológico y artístico que hay que tener en cuenta. A la hora de plantear nuevas ideas uno debe estrujarse la cabeza hasta límites insospechados e involucrarse a nivel personal con su creación. Como cualquier otro tipo de manifestación artística hay que poner el corazón para dotar a nuestra criatura de alma. De eso trata Indie Game: The Movie.

 

Desarrollar un videojuego indie no es fácil. Dedicar varios meses – o incluso años – en sacar un producto de calidad al mercado prácticamente en solitario es una titánica tarea. Sin grandes equipos detrás ni grandes medios para su ejecución, jugándose todo a una carta cuya validez es sola y exclusivamente responsabilidad del autor. Hablo de historias de esfuerzo y superación personal como las que narra este documental, que realiza un recorrido presentándonos a algunos genios de la industria que han parido exitosos títulos de esta índole en los últimos tiempos.

 

 

Edmun McMillen y Tommy Referes componen el Team Meat y son los padres de Super Meat Boy y The Binding of Isaac; Jonathan Blow es el visionario desarrollador francés creador de Braid; y Phil Fish, bueno, Phil Fish es el tío poco querido que ha parido el visionario Fez. Ellos son principalmente los protagonistas del film, sincerándose y abriendo su corazón para que podamos conocer mejor parte de las miserias y momentos difíciles que han pasado hasta alcanzar sus metas como artistas.

 

La total libertad creativa es un arma de doble filo. Ser capaz de plasmar emociones en un medio digital interactivo es mucho más complicado de lo que puede parecer a simple vista. Lo que les he comentado antes, hacer videojuegos no es fácil. Hablo de hacer cosas originales y genuinas. De “las otras” salen como churros a diario y resulta irrelevante la persona que esté detrás. Esa es la clave: Un juego indie es una obra personal, intransferible y única. Y por eso la película habla más de personas que de juegos en sí.

 

Pueden hacerse con la película a través de Steam o iTunes por 7€, aunque actualmente no existen subtítulos en castellano para la misma. Una interesantísima obra que no deberían dejar pasar si quieren conocer algo más sobre este mundo desconocido. Se van a sorprender. Sé de lo que les hablo.


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