Indie games: Continúa la batalla por ver quién es más enrollado

Si hace unos años alguien nos hubiera dicho que en el futuro los vieojuegos pequeños creados por estudios independientes de bajo presupuesto y distribvuidos por descarga digital iban a ser importantes, nos habríamos partido la caja. Si además ese alguien hubiera insistido en que estos juegos independientes iban a ser una baza importante a la hora de promocionar las nuevas y potentes consolas de la próxima generación, más de uno habría llamados a los chicos de blanco para que vinieran con camisas de fuerza. Ahora, Sony y Microsoft se meten en el baño a comparar tamaños -de catálogo indie, se entiende- y anuncian a bombo y platillo sus acuerdos. Lo que son las cosas... 

 

Fiesta en San Mateo

El pasado lunes 5 de mayo, el vicepresidente de Sony América, Adam Moyes hizo públicos doce nuevos títulos para el catálogo de PS4 en una presentación celebrada en las oficinas centrales del condado de San Mateo -San Francisco, California, les gusta vivir mal a los de Sony-. Una macedonia variada de géneros que incluirá algunos títulos que ya se han hecho míticos en otras plataformas: Apotheon, Axiom Verge, Chasm, Drifter, Escape Goat 2, Ironclad Tactics, Jamestown Plus, Nidhogg, Skulls of the Shogun: Bone-a-Fide Edition, Source, Starwhal y Spelunky.

 

 

Muchos de estos títulos serán compatibles con su adquisición vía Cross Buy, y otros ya han visto la luz en las plataformas de Sony PS3 y Playstation Vita. Por supuesto todos han sido retocados y potenciados para moverse líbremente en una resolución de 1080p, y en algunos casos vienen con contenidos adicionales respectos de sus anteriores entregas, como es el caso del título de estrategia Skulls of the Shogun: Bone-a-Fide Edition, que verá elevado su número de misiones a 24 gracias a un episodio cuya trama recae sobre un oficial recién llegado de la Costa de los Muertos que quiere acabar con el oficial Akimoto.

 

Otro que vendrá con contenidos extras será Jamestown Plus. Un clásico matamarcianos machaca-botones de esos que te ponen el antebrazo como Popeye que se inspira en una pequeña colonia británica en Marte para proponer horas de acción aérea sin demasiados quebraderos de cabeza. Más armas, más niveles y más aventura, eso reza el teaser de su aterrizaje en la next gen de Sony. Si hará gala a su nombre y dará un paseito por la biblioteca de juegos gratuitos del Plus, es todavía un misterio.

 

 

La exploración espacial de Drifter, los puzzles y la jugabilidad endemoniada de Escape Goat 2, el retro ambiente de Axiom Verge, el aspecto glorioso de ese RPG de plataformas llamado Chasm -no, no voy a utilizar ese palabro odioso de 'Metroidvania'-, la aventura homérica revolucionaria de Apotheon, la esgrima al estilo Ygdrassil de Nidhogg, más estrategia en Ironclad tactics, evolución retrofuturista con Source, la locura battleship de Starwhal y, por supuesto, Spelunky. Una ensalada de géneros que abarca un poquito de casi todo. 

 

¿Quién es tu papi?

Como decía al principio, la baza indie en la promoción de las consolas de nueva generación está siendo un sine que non para las grandes compañías a la hora de ofertar su plataforma. Hace un mes Microsoft volvía a apretar la válvula de su cuentagotas para darnos nuevas noticias de ID@xbox, y ahora le toca el turno a Sony de advertirnos de todo lo bueno que se avecina para los usuarios de PS4. 

 

 

Incluso yo, que no soy muy amigo del panorama indie, reconozco que hay un par de títulos que me han acelerado el pulso. El concepto RPG de Chasm, la ambiciosa representación cuasi onírica y sin reglas de Source, la ambiciosa exploración espacial con la que desde pequeño he soñado que promete Drifter y, por supuesto, Apotheon, son razones más que suficientes para comprender esta nueva forma de presión que invita al pulso de los grandes. 

 

Y ahora, como siempre, a esperar. A esperar que lleguen estos títulos. A esperar que esto no sea una moda pasajera, esperar a que realmente la escena independiente tenga mucho que enseñar a las grandes compañías y se conviertan en pioneros de géneros por descubrir o a re-descubrir del más remoto pasado. A esperar, en fin, que todo esto no quede en nada y podamos ver evolucionar nuestra afición en los próximos meses. 

 

¡Nos leemos! 

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