1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. XONE

¿Hay que deshacerse de personajes icónicos?

¿Puede haber Halo sin Jefe Maestro?
Por Víctor Junquera

Desde hace un tiempo estoy teniendo la impresión de que muchas desarrolladoras están queriendo acostumbrarnos a la despedida de más de un personaje icónico del mundo del videojuego, y la verdad, no lo vería tan mal en según qué casos.

 

La gota que ha colmado el vaso ha sido Halo 5: Guardians, o más en concreto, toda la promoción que está habiendo alrededor del gran exclusivo de Xbox One para este mismo año. El nuevo grupo co-protagonista encabezado por el Spartan Locke, quien hasta comparte portada con el mítico Jefe Maestro, ha sido el centro de todas las miradas y de gran parte de toda la campaña promocional del juego, mostrando nuevos diseños de Spartan, tecnología renovada y mejorada,... En definitiva, lo que a la saga le hace falta. En el último tráiler, incluso dan al Jefe Maestro por muerto.

 

 

Y todo esto no quiere decir que el Jefe Maestro vaya a morir definitivamente en esta última entrega, o al menos no se sabe aún, ya que no han sido pocas las veces que se le ha dado por desaparecido en combate, pero no me extrañaría que desde 343 Industries y Microsoft quieran hacer borrón y cuenta nueva con la saga. Han pasado más de 10 años por el Jefe Maestro y su diseño no ha cambiado un ápice. Sigue pareciendo un robot del año 2000, mientras que los nuevos Spartan tienen una infinidad de detalles que les hacen parecer más afines con el público actual, así que no me extrañaría si éste fuese el comienzo de Halo sin el Jefe Maestro.

 

Y esto ocurre con Halo, pero podríamos extrapolarlo a multitud de sagas, unas más nuevas y otras más antiguas, de esas que algunos pensamos que deberían acabar de una vez por todas mientras ansiamos en secreto una nueva entrega de algo que nos encanta. Naughty Dog, por ejemplo, hablaba recientemente de que Uncharted sería difícil de imaginar sin Nathan Drake, pero si hiciesen más aventuras con el mismo tono y tónica, si oliese a Uncharted y supiese a Uncharted,... ¿Habría realmente tanta diferencia, se llame Uncharted o no?

 

El caso de querer continuar la saga cambiando a un icono ya existe, y bueno, no es el mejor ejemplo porque no ha salido del todo bien. DmC: Devil May Cry funcionaba también como un intento de continuar con una marca de éxito sin la necesidad de estar ligada a todo lo que había acontecido en las cuatro entregas anteriores, y mantengo que como juego es muy bueno, pero claro, todos esos puntos que atraían a los fans hacia ese icono que era Dante ya no existen, generando el rechazo de muchos. Se podría pensar que Devil May Cry sin Dante no tiene sentido como un Mario sin Mario o un Sonic sin Sonic tampoco tendrían sentido, pero no es el caso.

 

Metroid Prime Federation Force

No es que sea un Metroid sin Samus. Es que no es un Metroid, aunque se llame Metroid.

 

Hay más ejemplos de intentos de explotación de una saga más allá de su icono, y los tenemos bien recientes y son bien evidentes. El caso más flagrante, aunque no es el más similar al caso de Halo con el que surgió todo esto es el de Metroid Prime: Federation Forces. ¿Puede existir Metroid sin Samus? Podría, desde luego que podría, y es que aunque seamos unos cuantos quienes queremos saber qué ocurre después de Metroid Fusion y cómo podría continuar ese fino hilo de historia que tiene la saga, en realidad nos serviría con ese juego que 'huela y sepa' a Metroid, que por supuesto, es algo que está muy lejos de lo que presentaron en el E3 2015.

 

Aunque en realidad el título con el que he sentido lo mismo que lo que se me pasa por la cabeza con Halo 5 es con The Legend of Zelda: Tri Force Heroes. Con Zelda en general, pero con este título experimental en concreto. Eiji Aonuma lleva años devanándose los sesos buscando la forma de hacer algo diferente con la saga, de romper con las convencionalidades, pero a los fans nos asusta lo que puede llegar a pasar.

 

Mientras que la empresa en cuestión debería dedicarse a hacer buenos videojuegos, el grueso de fans ruega por hacer que, además, esos buenos videojuegos concuerden también con historias que comenzaron hace diez, quince o treinta años. Mientras que muchas empresas creadoras de sagas relativamente nuevas son capaces de sacar muchos juegos diferentes, sin necesidad de unir sus historias pero bajo un mismo nombre y un mismo esquema jugable, otros tienen que esforzarse en encajar las piezas de sagas de culto.

 

The Legend of Zelda: Tri Force Heroes

Tiene patillas y flequillo de héroe, pero... No es el héroe que esperábamos.

 

Aonuma busca hacer cosas diferentes con la Zelda mientras que muchos sólo quieren un juego a la altura de Ocarina of Time, protagonizado por Link, con Ganondorf como villano y con Zelda como coprotagonista o princesa a rescatar, y que, además, explique cómo y por qué se inundó Hyrule antes de Wind Waker. Ah, el canon.

 

Y ante todo eso que la gente desea, Nintendo lanza un Zelda sin Zelda, y prácticamente sin Link. Un juego en el que no importa el personaje ni el mundo en el que estás, sino que sencillamente te pide jugar con una fórmula que funciona. Un buen videojuego que se llama Zelda como reclamo, pero aunque sepa a Zelda, huela a Zelda y se juegue como un Zelda, carece de facetas icónicas de la saga. Y en el fondo, no sería tan diferente del caso de un Halo sin Jefe Maestro.


<< Anterior Siguiente >>