¿Ha sabido vender Microsoft el mensaje de Xbox One?

Después de la montaña rusa de acontecimientos propiciados por la presentación en sociedad de Xbox One, Microsoft hace autocrítica: «No hemos sabido vender nuestro mensaje». Lo asegura Marc Whitten, responsable de producto de la consola, que en unas declaraciones a IGN ha dejado claro lo que es un secreto a voces, que la estrategia de Redmond para vender las bondades de su nueva consola no ha sido la adecuada.

«Es muy gratificante que haya gente emocionada con las especificaciones de la consola pero es una pena que no hayamos sido capaces de comunicar a la gente la dirección hacia la que queremos enfocar la consola. Lo primero que quiero es que la consola salga a la calley la gente la use. Pero tenemos que hablar del planteamiento de Xbox, de su aspecto digital porque hay un ector del público que cree que lo hemos dejado y no es cierto. Lo que hemos hecho ha sido dar una opción al jugador, hemos añadido una elección a la consola».

Las declaraciones llegan a raíz de otra petición por parte de los usuarios. Pero no de los cabreados inicialmente con el famoso tema de la conexión permanente y la segunda mano capada a través de la consola sino de los que consideran que, con el cambio de política, la consola ha perdido parte de su atractivo.

«Tenemos que explicar mejor nuestro trabajo porque creo que hemos hecho las cosas diferente a cómo la gente las ha percibido. Me doy cuenta de que lo que la gente quería era la posibilidad de poder escoger. Y hemos añadido la posibilidad de utilizar contenidos físicos y hacerlo de manera offline para que exista esa elección. Pero creo que lo importante es que la gente vea la consola y se dé cuenta de lo que es capaz», certifica.

Posiblemente, la opción que más se echa de menos de Xbox One sea la de poder compartir contenidos con tu familia. Quizá la más revolucionaria de todas las novedades presentadas hasta la fecha pero que incluso no se comentó en su presentación sino que supimos de ella de tapadillo. De hecho. aunque la función no vaya a estar de salida, Whitten asegura que la veremos tarde o temprano. De nuevo, una noticia que no le ha llegado al gran público por los canales oficiales. Y es ahí donde el responsable de Xbox One hace autocrítica.

«Una de las cosas que he aprendido es que no hemos hablado lo suficiente. No hemos explicado muchas de las características del sistema y, en cierta medida, nos dejó fuera de juego. Hemos aprendido muchas lecciones y a partir de ahora vas a ver cómo nos comunicamos mucho más con la comunidad. Si pudiera volver atrás en el tiempo, lo primero que haría sería mantener una relación mucho más abierta con los seguidores».

Aunque el debate de la segunda mano y Xbox One ya se ha apagado, nos sigue quedando la duda de quién gana y quién pierde en todo este asunto. Si partimos de la base de que el usuario va a tener que pagar sí o sí, sólo hay una incógnita por despejar: ¿dónde irá nuestro dinero? Y aquí la respuesta que planteaba Microsoft era clara, a la plataforma y a los estudios en contraposición al vendedor de toda la vida.

Una medida que, todavía no lo sabemos, desconocemos cómo iba a afectar al usuario pero que deja un claro perdedor: los estudios. Una cita de Quantic Dream respecto a Heavy Rain lo dejaba más que claro. «Vendimos dos millones de unidades pero sabemos, gracias al sistema de logros, que hay tres millones de jugadores. Eso significa un millón de copias de las que no hemos visto nada».