Bueno, seguimos con mi particular semana de Destiny, que termina mañana si no se me ocurre nada nuevo de lo que hablar. Esta vez quiero echar la vista atrás y recordar la beta con la que Bungie dejó que el mundo probara por primera vez y sin muchas restricciones su nuevo juego. Era una beta bastante grande, con muchos niveles y que abarcaba la Tierra y un par de modos de El Crisol, su PvP.
Mirándolo en perspectiva, me parece que Bungie nos dejó jugar a demasiado y aumentó todavía más nuestras expectativas con el juego: pudimos probar las super cargas de todas las clases, todos los tipos de armas, cambiar nuestro equipamiento y hasta pegarnos contra desconocidos en dos de sus modos multijugador. Ser generosos con las demos no es un problema, ojo, el problema es que el juego luego no esté a la altura.
Destiny no lo ha estado porque resulta que la Tierra es un cuarto del juego, que Vieja Rusia es el único mapa del planeta y que el Crisol solo tiene dos modos más, que son variaciones de los dos que hemos probado. Oh, y solo hay otra supercarga y ningún tipo de arma más, solo variaciones de las ya vistas. Sobre las misiones, pues también vimos casi todo lo que había que ver: no es que hayan añadido nada nuevo con respecto a la versión final.
Creo que la beta de Bungie dio una idea tan perfecta de lo que era el juego y de lo que se podía hacer con él que, cuando se salta a otro planeta, no sabe a mucho. Cuando se descubre una nueva arma, no hay una auténtica sorpresa. Puede que los tipos de enemigo si sean diferentes, pero seamos honestos: solo hay dos razas más a parte de los caídos y la colmena, que ya se vieron en la beta.
Creo que podría haber disfrutado un poquito más de Destiny, aunque lo estoy disfrutando lo suficiente, si no hubiera jugado a la beta y me hubiera, digámoslo así, spoileado medio juego. Cuando me tocó repetir las misiones de la Tierra al empezar el juego, ya conocía una buena parte del mundo de Destiny. Y si algo tenía que hacer especial a este juego era la sensación de descubrimiento y la novedad. La beta mató eso para mi. Espero, sinceramente, que a vosotros no os haya afeado tanto la experiencia.