Glass Wing me ha enamorado

Pongámonos en situación. Tenemos unos 40 grados a la sombra, en casa hay aire acondicionado y un ordenador esperando que te levantes de la cama para darte los buenos días con píxeles. Tu cerebro, derretido por el agotador azote del verano, no tiene muchas ganas de dedicarse a juegos oscuros, de trama rebuscada y mundos inmensos. Tu cartera tampoco. Es entonces cuando recuerdas que existe algo maravilloso llamado “Ofertas de Steam”, y decides pasear por el amplio catálogo que Valve te ofrece desde la comodidad de tu silla, sillón, sofá o cama, si es que te saltaste el paso de levantarte. Decides buscar juegos baratos, de estos de los que nunca habías oído hablar, pero sabes que existen porque están en esta plataforma. Y la encuentras a ella.

Se llama Mayfly, es una niña rubita de aspecto delicado, asustadiza y frágil, con un par de alas de cristal en la espalda. Sin ningún poder especial en apariencia, está condenada a caer en las garras de los oscuros demonios que, liderados por un tal Ferace, intentan arrebatarle la paz, la tranquilidad y cada una de sus peculiares plumas.

Glass Wing es una obra maestra en miniatura, un título doble hache: humilde y hermoso. Si bien sus escenarios son sencillos y hasta repetitivos, el encanto que desprenden nos hace olvidarnos de que esas dos setas ya las hemos visto. Por no hablar de la música, que es otra pequeña gran obra. Todo el conjunto de este título de From Soy Sauce supone un refrescante indie híbrido entre plataforma y puzzle, el juego perfecto para esos días de verano en los que te preguntas “¿Para qué coño voy a salir de casa?”.

Un juego breve, pero intenso, de esos que te pueden durar una tarde, pero no dudarías en volver a pasarte. La estética pseudoanime de la adorable Mayfly hace que te llegue todavía más al corazón, sobre todo si eres amante de las “japonesadas”, y su clara inspiración en The Legend of Zelda lo hace más deseado. Si estás buscando juegos para tus tardes de verano, o si simplemente te quieres quedar en casa para combatir la ola de calor con total pasividad, Glass Wing es tu juego. A mí me ha enamorado.

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