1. Mundogamers
  2. Noticias

Forzando el cooperativo

No todos tienen amigos para jugar online
Por Dayo

De toda la vida he jugado solo. No es que no tenga amigos, pero hasta que entré en esta sagrada casa había muy poca gente de mi entorno que jugase a videojuegos. Una vez eché una partida de Gears of War 2 con un amigo de cine. Fue divertido. Y de vez en cuando, cada muchos meses, organizamos party LAN con los amigos de toda la vida. También he jugado un par de sesiones al Lef4Dead 2 y he jugado a World of Warcraft y Guild Wars con mi familia. Quizá penséis que estoy contradiciéndome y de pronto resulta que he jugado muchísimo con mis amigos, pero en realidad estoy enumerando las pocas ocasiones que he compartido una experiencia lúdica en línea. El resto se limitan a partidas al Halo 3, al Towerfall Ascension y al Soul Calibur III en mi casa, así que no cuenta.

 

Todo esto viene a cuento porque estoy a punto de llegar a nivel 20 en Destiny y la única vez que he jugado con alguien que conozco ha sido con mi estimado compañero Adrián Suárez, con el que desgraciadamente no pude ni hablar porque no sabía dónde tenía el micrófono. La partida duró como veinte minutos. Ahora juego por las mañanas y no hay nadie conectado. Destiny está diseñado como un juego en solitario pero, para disfrutarlo plenamente, hay que verlo como un juego social; lo muestra su tráiler en el que tres amigos se lo pasan chachi pistachi mientras disparan en la cara a todo aquello que se mueve. Hace unas semanas leí en Twitter la experiencia de cómo una persona había “pillado” Destiny: había enviado una invitación a un amigo suyo sin respuesta. Al rato y, enfrentándose a un jefe final sin ninguna esperanza de ganar, el amigo aparece de pronto y le salva la vida. “Entiendo Destiny”, decía.

 

Bueno, yo no entiendo Destiny.

 

 

“Juega con alguien entonces”, diréis. Sí, podría hacerlo. Podría decir en Twitter que voy a jugar a Destiny y que si alguien quiere unirse, que se apunte. Tengo 2.662 seguidores: alguien cae fijo. O podría avisar a alguien de MundoGamers por Facebook o WhatsApp. Se supone que es lo más razonable, pero por el bien de este argumento supongamos que de pronto todos me odian porque me he meado en sus alfombras y vivo en un pueblo de Madagascar sin Internet. O, más bien, volvamos a antes de que entrase en MundoGamers o abriese Post Script. Es la situación de mucha gente; no todos tienen a sus amigüis a mano para poder jugar a los títulos online de turno basados en la cooperación. Y se supone que esos son juegos que sólo pueden disfrutarse plenamente si tienes alguien con quien jugar. No un tipo cualquiera que te encuentres jugando por ahí en un servidor aleatorio; un amigo con el que coordinarte y disfrutar. Lo que venden en el E3 cuando se enciende un foco y hay otro tipo de pie cogiendo el mando en una posición dramática es jugar con alguien cercano a ti, alguien que conoces. Es lo que pretenden con Assassin’s Creed: Unity, con Far Cry 4, con cualquier juego que venden con un modo cooperativo.

 

Recuerdo hace unos años, tras no recuerdo qué E3, que leí a alguien hablando sobre cuánto se alegraba de que las consolas se centrasen en capacidades sociales que no tenía intención de usar. Lo importante son los videojuegos y, para mucha gente, el único plan disponible es jugar solo. Que haya tanto interés en opciones cooperativas que no salen de ninguna parte lo único que consigue es alienar a una parte de la comunidad. Far Cry 3 iba de tu historia personal, de explorar a solas una isla y relacionarte con ella ¿de pronto resulta que sólo se puede “enriquecer” tu experiencia jugando con un conocido online?

 

Por supuesto, esto no significa que me oponga a todos los juegos que incluyan un modo cooperativo. Left4Dead es el ejemplo ideal: es un título que se ha diseñado pensando en la cooperación con amigos. Payday2 da la opción de que, si lo compras en Steam, adquieras un pack con cuatro copias por un precio reducido porque ese es un juego que depende de la coordinación. He probado a jugarlo online en servidores aleatorios y el resultado es catastrófico. La diferencia es que estas son experiencias que, de base, están pensadas para jugarse con amigos. No estoy diciendo que de pronto no haya ningún juego que ofrezca jugar en cooperativo o tenga opciones sociales, pero hubo una época oscura en la que todos los juegos forzaban modos multijugador competitivos porque todos querían ser Modern Warfare. No sé quién es el genio que ha inspirado esta nueva ola, pero ahora hay muchos títulos que están forzando capacidades cooperativas online para jugar con los amigos. Y no todos tienen amigos online. Supongo que esto ocurre porque así mantienes a la gente enganchada: se disfruta en compañía, te diviertes de las tonterías, planificas hacia dónde ir, os empujáis el uno al otro para manteneros atentos. Llega el DLC y no sólo compras tú sino también tu amigo. Es un plan inteligente pero no uno práctico para muchos jugadores. Mucha gente no tiene acceso a la experiencia completa. Es maravilloso cuando haces un juego pensado desde cero para que nos comportemos como seres sociales, pero no forcemos. Al menos con el competitivo daba igual a quién nos enfrentáramos.


<< Anterior Siguiente >>