Final Fantasy XIV: el MMORPG más prometedor
Con Final Fantasy nos ha pasado algunas veces lo mismo que nos pasó con Heath Ledger – en paz descanse – y lo que nos está pasando ahora con Jared Leto: No nos terminan de convencer con según qué papel tomen. El Joker de Ledger resultó ser increíble, si bien también se le ha sobrevalorado un poco con el fallecimiento del actor, y con Final Fantasy pasa algo parecido, fallecimientos aparte.
La primera vez que oímos hablar de una mínima posibilidad de tener un juego de esta saga completamente online nos echamos las manos a la cabeza. Final Fantasy XI tuvo una acogida variada, con diferentes opiniones, allá por el 2002 (o 2004 en nuestro caso). Como lo llamó IGN en su momento “buen juego, pero poco original”, este título de la saga consiguió sobrevivir y salirle rentable a Square Enix, aunque las ganancias no se vieron incrementadas hasta bastante tiempo después de su lanzamiento.
Para mí, Final Fantasy XI pasó sin pena ni gloria, como cualquier otro juego multijugador en línea bien hecho: Es bonito, se disfruta, pero no hay nada que me haga quedarme para siempre. Algo que sí parece conseguir su sucesor y quien ocupa el resto de mi artículo de hoy: Final Fantasy XIV y sus fabulosas expansiones.
Presentado por la compañía en el E3 de 2009, Final Fantasy XIV iba a ser exclusivo de PlayStation 3, según nos dijo Jack Tretton durante la conferencia de Sony. Algo que Square Enix se apresuró a desmentir en el propio E3, asegurando que también se lanzaría en PC (y menos mal). Desde su salida al mercado y a las redes en 2010, este juego ha tenido un impacto muy negativo, algo que, por suerte, consiguieron anular sus revisiones. A Realm Reborn supuso, verdaderamente, un renacimiento, un resurgir de este título que se hubiera quedado en la miseria si la compañía no hubiera reaccionado a tiempo.
No obstante, Final Fantasy XIV no nos vende nada nuevo con respecto a su antecesor, ya que, como se afirmó desde Square Enix, el juego buscaba resultar familiar a los jugadores que ya hubieran vivido la experiencia del XI, de ahí que las seis razas jugables son similares a las del anterior juego, mientras que las clases o disciplinas sí tienen sus matices. Un sistema de clases, por cierto, que, aunque bajo mi humilde opinión está en construcción, puede llegar a ser muy completo y curioso.
En cinco años de vida, la evolución de este título ha sido fascinante. Ya tiene acumuladas unas 100 mil millones de horas de juego, sumando los personajes de todos los jugadores, que cada día son más. La primera expansión del juego, Heavensward, ha recibido muy buena crítica, tanto de medios como de los propios usuarios y el éxito y la acogida que está teniendo le están dando mucho nivel a todo el título.
El éxito del MMORPG no es sólo mérito suyo, por supuesto. También ciertos despropósitos de otros grandes del género han hecho que Final Fantasy XIV sea la mejor opción del catálogo. Sin ir más lejos, los jugadores de World of Warcraft comenzaron a mudarse a Eorzea, el mundo en el que se ambienta el juego de Square Enix. Los más fieles del wow rompen esa fidelidad al darse cuenta de que su juego ya no es lo que era y “se lo están cargando”. Ojo, que nunca llueve a gusto de todos, y mientras algunos pensamos que Warlords of Draenor es una expansión muy interesante, otros consideran que no ha sido más que la perdición de WoW.
Así que, entre los jugadores experimentados que se pasan a Final Fantasy, y los recién llegados que encuentra en él todo lo que un MMORPG de ahora necesita, Square Enix ha acertado. Los gráficos, el universo, la historia, las clases, las razas… Todo parece haber sido cuidado al detalle para que cualquier perfil de jugador pueda disfrutarlo. ¿Es Final Fantasy XIV el MMORPG más potente y prometedor de la actualidad? Pues… yo diría que sí. Pero, claro, eso sigue siendo mi opinión, y a los más fieles del World of Warcraft no hay quien nos mueva.
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