Entwined: Arte y otras formas de entrar en trance
Os hablaba ayer de Styx: Master of Shadows, aprovechando que venía gratuito con los juegos de Playstation Plus de julio, y no dejaba de explicaros cómo me había sorprendido su apuesta por un género ya pasado llevándolo a otro nivel con su planteamiento ambicioso y su aspecto más acorde a los tiempos actuales.
Hoy me toca hablar de otro de estos títulos de julio para Playstation 4, Entwined. Un juego que se presentó el año pasado durante el E3 2014 y que nos hablaba de belleza y sintonía olvidando, por el camino, un montón de factores positivos que hacen de éste juego algo interesante a tener en cuenta.
Entwined y la búsqueda de la belleza
Que Entwined es bonito es algo fuera de toda discusión: Fondos oscuros que van ganando en profundidad de elementos, dos figuras de origami que surcan el espacio a la par aprovechando efectos de neón y una música perfectamente intercalada con nuestros movimientos, siguiendo el estilo que, en su momento, pudimos disfrutar con Rez aunque en esta ocasión de forma mucho más armónica y menos frenética.
Lo mejor es que, detrás de su planteamiento sencillo y de esa historia de amor a lo El Hombre y La Tierra entre la garza y la carpa, se oculta un sistema de juego que nos invita a continuar con un único y platónico fín: El de la búsqueda de La Belleza.
Arte y otras formas de entrar en trance
Entwined entra de lleno en el género de los tunnel shooter con un planteamiento que ha sido misión extra en Captain Skyhawk o Jak and Daxter y juego propio en Rez o SineWave. Sin embargo, la carpa y la garza se quedan con toda la belleza de esta forma de hacer las cosas y se alejan de la acción, eliminan los disparos para convertir el viaje en sólo eso, un viaje en el que lograr la ruta perfecta y no crear disonancias -en este caso melódicovisuales- en nuestro vagar.
De esta forma, el trance frenético al que nos sometían las altas velocidades, las esquivas y el tiroteo constante de los viejos shooters dan paso a un trance mucho más evocador en el que -como decía hace un par de párrafos- La Belleza es lo único que realmente importa.
No deja de resultar interesante cómo en plena mitad de la segunda década del nuevo milenio es posible recuperar las expriencias de los viejos videojuegos -ayer lo decía con Styx, hoy con éste Entwined-. Me maravilla cómo esas viejas experiencias vuelven pero de una forma diferente, más sosegada y artística. Es impresionante cómo el dejarte llevar te hace alcanzar la fusión de nuestra mente, nuestros reflejos y nuestras manos con un mando de consola que en la televisión va creando historias visuales que nos invitan a la meditación trascendental.
¿Un viaje a ti mismo?
Entwined no es un juego a la vieja usanza, sino que más bien es un mandala interactivo cuyas melodías, formas y colores nos invitan a relajarnos y alejarnos del mundanal ruido, de los problemas, del ajetreo del día a día. Es un retiro a un rincón seguro, fresco, tranquilo en el que dejar pasar el tiempo. Es un agradable sueño del que despertar repletos, descansados y con fuerzas para volver a empezar.
Y no deja de sorprenderme que aún a día de hoy los juegos puedan seguir sorprendiéndome a estos niveles.
¡Nos leemos!
<< Anterior Siguiente >>